Las dos últimas novias que tuvo George Clooney antes de encontrar a su media naranja -Amal Alamuddin, con la que se espera una boda en breve- han tenido su final feliz. Si Stacy Keibler se casaba el pasado marzo, ahora llegó el turno para Elisabetta Canalis. La velina, siendo fiel a sus orígenes, ha celebrado una romántica boda al más puro estilo italiano en la bella catedral de Alghero, en el norte de Cerdeña, su tierra natal.
Las idílicas calles empedradas –por las que hace menos de cuatro años paseaba de la mano del galán de Hollywood- vieron como Elisabetta Canalis llegaba con el rostro cubierto por un velo y un vestido vaporoso de capas y encajes que tenía una cola de cuatro metros, en la que se envolvió suavemente al más puro estilo de una madonna italiana.
Al bajarse del coche Elisabetta se mostró un poco sonrojada ante la expectación que creó su llegada y lanzó besos y saludos a los allí congregados, antes de entrar al templo donde le esperaba su futuro marido, el cirujano estadounidense Brian Perri, al que lleva unida sentimentalmente desde el otoño de 2013.
Después de la ceremonia -en la que se dieron cita invitados de Italia y de Estados Unidos – el nuevo matrimonio fue recibido con una lluvia de arroz y de pétalos de rosas blancas a la salida de la iglesia. En ese momento se pudo apreciar el maquillaje natural y el pelo suelto que llevaba la novia. Desde allí, según los medio italianos, partieron hacía unos conocidos viñedos en los que se celebró el banquete.
Las primeras horas como marido y mujer han sido contadas por la propia Elisabetta en sus redes sociales, que anunció que iba a dar un paseo en bici con Brian y después aprovechó para darse un baño en el mar con algunas de las amigas, que habían sido testigo de su cuento de hadas.
Así cumplió esta explosiva italiana el sueño de casarse en la tierra en la que se crió. Elisabetta vivó en Cerdeña hasta los 18 años, cuando se trasladó a Milán para estudiar y abrirse paso en mundo del espectáculo, allí se convirtió en una conocida azafata y presentadora de televisión. Aunque el mundo entero supo quién era gracias a su papel más envidiado, en el de novia de George Clooney, con el que estuvo saliendo durante casi dos años y con el que tenía muchas cosas en común, entre ellas su pasión por Italia. No en vano su romance se comenzó a fraguar a orillas del lago Como, en donde el actor posee una fabulosa villa que muy pronto puede convertirse en lugar donde él pierda su codiciada soltería.
Tras la ruptura con George Clooney, la italiana tuvo breves romances conel modelo y actor Mehcad Brooks y con el protagonista de Jackass, Steve-O, pero sin duda la estabilidad parece haberla encontrado al lado del cirujano. Así que Elisabetta finalmente ha puesto el broche de oro a su historia de amor siendo la protagonista de un enlace de ensueño al más puro estilo italiano.