A tan sólo una semana de la boda de Kim Kardashian y Kanye West, el secretismo sigue envolviendo todo lo relacionado con el esperado enlace. Si bien se había especulado sobre la posibilidad de que la pareja se diera el "sí, quiero" en París, parece que la boda se celebrará finalmente el próximo sábado 24 de mayo en Florencia.
Kim Kardashian afirmó, poco después de darse a conocer su compromiso, que esperaba "casarse este verano en París", ya que es "como una segunda casa" para ellos. Sin embargo, tal y como ha confirmado la publicación People, los planes de Kim de celebrar su enlace con Kanye en la Ciudad de la Luz se han visto alterados, trasladando su boda a una histórica fortaleza de la ciudad italiana.
Del romántico castillo parisino que se señaló como posible localización para la boda a un escenario italiano muy diferente pero con el mismo encanto. Se trata del Belvedere, una fortaleza del siglo XVI ubicada junto a los famosos Jardines Boboli que se ha convertido en un símbolo florenciano. La pareja habría desembolsado 300.000 euros para alquilar el edificio, cuyas salas con decoración toscana acogerán a sus aproximadamente 1000 invitados. El rapero ha pasado varios días en Florencia ultimando los detalles junto a un gran amigo, el diseñador Ermanno Scervino, y no han tardado en dispararse los rumores de que Scervino podría ser el diseñador elegido para vestir a los novios, que ya han llevado creaciones suyas anteriormente.
Aunque Florencia parece ser el escenario definitivo, no han olvidado la importancia de París para Kim. La capital francesa seguirá formando parte de las celebraciones nupciales, y allí tendrá lugar una cena previa a la boda. Tras la velada en París, los invitados volarían hasta Florencia, donde disfrutarán de los escenarios de ensueño del Belvedere. Vistas panorámicas de la ciudad e impresionantes muestras de arte italiano son sólo algunos de los atractivos que ofrece la fortaleza, reabierta en 2013 tras cinco años de reformas, a los invitados de Kim y Kanye.
Y mientras la expectación en torno a la boda no hace más que aumentar, sus protagonistas parecen estar ya más que preparados para el gran día. Este fin de semana, Kim disfrutaba de una fabulosa 'bridal shower' en la que estuvo rodeada de amigas y familiares, incluyendo, por supuesto, al clan Kardashian. En esta despedida de soltera pudimos ver a Kim vestida de blanco, pero todavía habrá que esperar para saber qué diseñador ha elegido para el día de su boda, una de los secretos mejor guardados.