Después de la tormenta se dice que siempre llega la calma y parece que en el caso de Miranda Kerr también ha sido así. Tras un año distanciado de su familia, la modelo ha volado a Australia para reencontrarse con sus familiares y no lo ha hecho sola, sino acompañada de su hijo Flynn. Las aguas parece que poco a poco vuelven a su cauce y después de pasar unos días en China por motivos profesionales, la que fuera mujer del actor Orlando Bloom ha regresado a su tierra natal para protagonizar un esperado reencuentro.
Era a principios de este año cuando la madre de Miranda, Therese, acudía a un programa de la televisión australiana para relatar que hacía más de un año que no tenía contacto con la modelo cuando antes se telefoneaban casi todos los días. La madre de la que fuera Victoria's Secret declaraba: "La vida de Miranda es muy diferente ahora, y está rodeada de gente que le dice que sí a todo constantemente. Para mí es muy importante que su vida sea real, que sea verdad, que sea quien ella necesita que yo sea".
Por su parte, el padre de Miranda, John, maldecía la popularidad de su hija deseando que fuera una chica anónima: "Desearía que fuese simplemente una chica normal, cotidiana. Realmente lo desearía".
Olvidadas estas acusaciones, a las que Miranda prefirió no entrar, la modelo quiso pasar el día de la madre con cuatro generaciones de su familia, incluyendo a su madre, abuelas y tías. Una jornada muy especial que la australiana quiso plasmar en una fotografía que acabó difundiendo en las redes sociales junto a este mensaje: "Un día muy especial con mi familia. Feliz día de la madre a todos".
Y por si existía alguna duda de resentimiento, Miranda Kerr concedió una entrevista a la emisora Nova Fm de Sídney donde declaró: "Estoy muy orgullosa de mi madre". "Ella debería escribir un libro de recetas, pues fue ella quien me enseñó a cocinar. Soy muy afortunada de estar rodeada de mujeres tan maravillosas” añadía la modelo.
Muy contenta por este reencuentro, la australiana también hablaba sobre su papel de madre afirmando: "Ser madre da mucha alegría a mi corazón. Estar con mi hijo y pasar todo mi tiempo con él es lo mejor de mi vida”. En cuanto a su separación de Orlando Bloom el pasado mes de octubre Miranda comentó que lleva muy bien afirmó compartir el cuidado de su hijo con su padre, pues a pesar de la ruptura ambos están dando un gran ejemplo de convivencia. "Creo que lo más importante es tener dos padres felices. Él es muy feliz y yo también" sentenciaba la australiana.