Después de que hace unos días la Corte Superior de Los Ángeles desestimara la tercera demanda que Antonio de la Rúa interpuso contra su expareja, la cantante Shakira, el argentino ha roto su silencio y ha concedido varias entrevistas de radio en las que asegura que la batalla legal no ha terminado y que está dispuesto a seguir luchando en los tribunales por lo que, a su juicio, cree que le corresponde.
"En esta diferencia que tenemos con Shakira estamos en la primera etapa, que es establecer la jurisdicción apropiada para iniciar un juicio. Este proceso es muy largo y sólo estamos en el principio. Ella inició una demanda contra mi en las Bahamas, que es el lugar en el que a ella le gustaría que se llevara este juicio, mientras que yo entendía que Los Ángeles era un tribunal apropiado para llevarlo, porque es un tribunal con mucha experiencia en cuestiones de este tipo", aseguró De la Rúa en W Radio.
"El juez de Los Ángeles no ha dicho que yo no tenga derecho sobre los activos de la cantante, sino que simplemente se refirió a que prefiere que sea otra jurisdicción la que lleve el caso porque se trata de dos personas no residentes en la ciudad y es una corte saturada de casos", concretó,
"Así que ahora yo tengo que decidir si acepto lo que propone Shakira, que considera a Bahamas o Colombia como los lugares más apropiados. Una vez que tengamos determinado el lugar donde se va a hacer el juicio, entonces ahí empieza a evaluarse los méritos, y la posibilidad de cada uno de presentar las pruebas. Cada uno tendrá que demostrar su verdad hasta que una persona determine qué le corresponde a cada persona".
El exnovio de la artista asegura que tiene derecho a recibir parte de las ganancias generadas por la cantante, ya que su aportación como socio la llevó a firmar contratos millonarios y a crear su fragancia: “No teníamos un contrato escrito, solo un acuerdo oral en el que decidimos distribuirnos las ganancias: Shakira en un porcentaje mucho mayor por ser la artista y yo mucho más pequeño por ser el que construía la plataforma económica. Siempre nos hemos distribuido las ganancias año a año”.
Para el argentino, los problemas surgieron cuando la cantante se puso en manos de otros abogados, supuestamente aconsejada por Gerard Piqué. "Iniciamos una sociedad con Shakira en el 2004. Ella ha explicado en muchas ocasiones cómo estabámos organizados. Ella llevaba la parte artística y yo me encargaba de todo lo relacionado con los negocios. En el 2010, cuando termina la relación sentimental, decidimos continuar con la relación profesional por un poco menos de un año, que es cuando aparece el abogado de Shakira a interrumpir esa sociedad y de socio me rebautiza en asesor, y me dice que no tengo derecho a nada de lo que había construido con mi gestión de negocios", declara Antonio, que sigue solicitando a la artista colombiana ni más ni menos que 100 millones de dólares (unos 77 millones de euros) porque considera que contribuyó en su éxito y a convertirla en la estrella que es hoy en día.
"Ya nunca más pude hablar con ella, le escribí varias veces para reunirnos... Lo lógico cuando se termina una sociedad es que los dos socios se sienten y lo arreglen. Pero yo no cuestiono en absoluto a Shakira por terminar con la sociedad, porque tiene todo el derecho. Su vida cambió y construyó una vida distinta, pero lo que no es lógico es que no se haya abierto un espacio de diálogo y se llegara a un acuerdo".
A pesar de todas las diferencias, el hijo del expresidente argentino Fernando de la Rúa, asegura alegrarse del feliz momento tan especial que atraviesa Shakira, que tiene un niño, Milan, junto al deportista del FC Barcelona. "Por mi parte no queda ninguna cuenta pendiente con ella en lo personal. La veo feliz y eso me hace feliz. Ha conseguido muchas cosas que quería, como formar una familia. No puedo más que desearle todo lo mejor a una persona con la que he estado 11 años. Para mí es una alegría verla bien, supongo que para ella será lo mismo”, concluyó.