María de Villota se ha casado por sorpresa: 'Estamos muy felices'
Ejemplo de superación y pura vitalidad, ha dado el 'sí, quiero' a Rodrigo García Millán, el hombre por el que siente 'un amor incondicional' y que ha estado a su lado en los momentos más difíciles
"Quiero compartir con todos vosotros que Rodrigo y yo nos hemos casado en Santander. Estamos muy felices". Con este breve mensaje y este 'pedacito' de foto en la que podemos verla radiante vestida de novia, María de Villota ha querido compartir con todos nosotros el que ha sido, sin duda, uno de los días más inolvidables de su vida.
Ha pasado un año desde que María sufriera un gravísimo accidente que casi le cuesta la vida en Inglaterra. Un suceso del que, doce meses después, y gracias a su afán de superación dentro y fuera de las pistas, se ha recuperado como lo que es: una gran campeona. Irradia felicidad, derrocha vitalidad y no puede borrar la sonrisa de su rostro. ¿El responsable? Rodrigo García Millán, un joven entrenador personal de 29 años que ha estado a su lado en su recuperación y que ahora la ha convertido en su mujer en una bonita historia de amor con doble final feliz.
"Sabía que algún día nos casaríamos, pero Rodrigo me sorprendió al pedírmelo antes de celebrar el primer aniversario de mi revivir. Fue unos días antes del 4 de julio y en nuestro rincón favorito: un faro de Santander. Cuando me giré para contemplar el precioso atardecer, allí estaba él, arrodillado y con el anillo de pedida en su mano. Recuerdo que me emocioné muchísimo y lloré sin parar. La vida es un regalo, y yo me consideró una mujer afortunada por tener a mi lado a un hombre increíble", confesaba María hace unos días al anunciar la feliz noticia en las páginas de la revista ¡HOLA!. "Ya estaba enamorada de él, pero, tras el accidente, descubrí un amor incondicional que está por encima de todo", añadía.
El broche de oro a una bonita historia de amor
A pesar de que María y Rodrigo no han llegado a cumplir dos años de noviazgo, ha sido tiempo suficiente para decidirse a dar el gran paso y unir sus destinos por el resto de sus vidas. "Nos conocimos haciendo deporte. Yo quería comprarme una bicicleta y él me asesoró", contaba emocionada. "El primer día que me miré al espejo, me pregunté: '¿Quién me va a querer a mí?'. Sin embargo, he recibido tanto cariño que no cabe en una vida, por eso he necesitado dos". ¡Muchísimas felicidades a los recién casados!