Cuando uno ha vivido tan intensamente como Mick Jagger no es de extrañar que tenga en su currículo sentimental alguna que otra historia. En el caso de este rockero, felizmente unido actualmente a la diseñadora de moda L’Wren Scott, con la que lleva 12 años, si de algo puede presumir es de lo bien que se llevan las mujeres de su vida. En la fiesta Serpentine, el vocalista de los Rolling Stones podría haber vivido una situación más que incómoda si no fuera porque su variada familia congenia a las mil maravillas. Y es que en dicha cita coincidieron su primera exmujer Bianca Jagger y la hija de ambos, la diseñadora Jade Jagger, con Georgia, fruto de la unión de Jagger y Jerry Hall, y L’Wren, actual pareja de Mick.
Pero no hubo en absoluto ningún problema. Como viejos amigos posaron todos juntos para los objetivos de las cámaras, demostrando que el tiempo pone las cosas en su sitio y que pese a las diferencias del pasado se puede pasar página. Lo cierto es que estaba excelentemente rodeado, tanto que seguramente algunas miradas que le dirigieron eran de envidia. L’Wren presumió de figura a sus 46 años con un ajustado vestido largo de color dorado y detalles de pedrería, mientras que Jade combinó el siempre acertado negro con el tono plata. Haciendo suyo el dicho de juventud divino tesoro, Georgia lució piernas con un mini vestido rojo de lentejuelas. Todo el estilo de la familia reunido en una instantánea.
Mick y Bianca se divorciaron en 1978 después de siete años de matrimonio y una hija en común, Jade. Luego el intérprete salió con Jerry Hall durante diez años antes de decidirse a dar de nuevo el "sí quiero", esta vez por el rito hindú. Con ella tuvo cuatro hijos, Elizabeth, James, Gabriel y Georgia, pero, tras otros diez años, se separaron. Tiene además otros dos hijos, Karis, fruto de su relación con Marsha Hunt y Lucas, con la modelo Luciana Jiménez.