La tía de Angelina Jolie ha fallecido a causa de un cáncer de mama, apenas dos semanas después de que la actriz confesara haberse practicado una doble mastectomía preventina por haber heredado un alto riesgo de padecer cáncer de mama y ovario.
Ahora es Debbie Marti, la hermana de su madre, quien ha perdido la batalla contra el cáncer. Debbie murió ayer a los 61 años en el Palomar Medical Center en Escondido, cerca de San Diego, según informó un portavoz del hospital de California. Su esposo, Ron Martin, reveló a Sky News que su esposa tenía una alteración genética, la misma por la que Jolie se practicó una doble mastectomía.
La madre de Jolie, Marcheline Bertrand, murió de cáncer de ovarios en 2007 a los 56 años. El pasado 14 de mayo Jolie publicó una emotiva carta publicada en el periódico The New York Times titulada ‘Mi elección médica’ para contar por qué decidió pasar por el quirófano, pero lo que desconocíamos entonces es que la tía de Angelina estuviera sufriendo esta misma enfermedad. "Quería escribir esto para decirle a otras mujeres que la decisión de someterse a una mastectomía no fue fácil. Pero ahora estoy muy contenta de haberlo hecho. Mis posibilidades de desarrollar un cáncer de mama se han reducido de un 87 por ciento a menos del 5 por ciento. Puedo decirles a mis hijos que no tienen que temer porque me vayan a perder por un cáncer de mama", confiesa Jolie, madre de 6 hijos junto al actor Brad Pitt.
"Mi madre luchó contra el cáncer durante casi una década, y murió a los 56 años. Vivió el tiempo suficiente para ver al primero de sus nietos y para mantenerlo en sus brazos. Pero mis otros hijos nunca tendrán la oportunidad de conocerla ni experimentar quien era ella", señala. La intérprete, quien admite no sentirse menos mujer por haber dado este paso, finaliza la carta explicando por qué ha decidido contar su operación y no mantenerla oculta por más tiempo. "He decidido no mantener mi historia en secreto porque hay muchas mujeres que no saben que podrían estar viviendo bajo la sombra del cáncer. Tengo la esperanza de que ellas también sean capaces de obtener pruebas genéticas y que, si tienen un alto riesgo, también sepan que tienen opciones".