La duquesa de Alba aterrizó hace dos días en Ibiza y ya está disfrutando al máximo de los placeres que ofrece la isla junto a sus nietos Luis y Amina, los mellizos de Cayetano Martínez de Irujo y Genoveva Casanova. Acompañada de una persona de servicio, doña Cayetana llegó a la playa haciendo gala de su particular estilo. A sus 86 años, lució un bikini en tonos azules y completó su 'look' con un original sombrero, un 'kaftan' de flores y un moderno bolso de mimbre.
Luis y Amina, que hace unos días estaban de vacaciones junto a sus padres en Cádiz, disfrutaron de una agradable jornada de la playa con su abuela. Los mellizos estuvieron muy pendientes en todo momento de la duquesa de Alba, quien no dudó en adentrarse en el mar para jugar con ellos. Los tres asistieron juntos a misa este fin de semana y disfrutaron de una función del circo.
Después de pasar unos días en San Sebastián, ciudad a la que se trasladó junto a su marido y donde recibió la visita de su hija, Eugenia, la duquesa se instalará ahora en su residencia de la isla pitiusa hasta poner de nuevo rumbo a Sevilla o quizá a otro desconocido destino de vacaciones.
La duquesa se encontraba en el aeropuerto de la isla balear esperando a sus nietos cuando hizo unas declaraciones sobre el fallecimiento de Belén Ordóñez: "Era muy amiga de ella, una pena porque echó su vida a perder", dijo ante los reporteros que allí se encontraban. La aristócrata, que no asistió al entierro, quiso dar el pésame públicamente a la familia y amigos de la fallecida.
Doña Cayetana ha llegado a Ibiza en un momento familiar algo delicado debido a la decisión de Francisco Rivera de pedir la custodia de la hija que tuvo durante su matrimonio con Eugenia. Mientras llega el momento de la resolución, madre e hija permanecen más unidas que nunca, por lo que no sería extraño ver a la duquesa de Montoro reunirse con su madre en la isla.