El crucero Costa Allegra, que a causa de un incendio el pasado lunes se quedó sin electricidad a la deriva en el Oceano Índico y ha tenido que ser remolcado durante tres días por un pesquero francés, llegó hoy a la isla de Mahé, la mayor del archipiélago de las Seychelles, y los pasajeros están preparados para desembarcar. La nave partió el pasado sábado de Diego Suárez y se dirigía al puerto de Victoria (Mahé, Seychelles), donde tenía previsto llegar este martes, pero un incendio en la sala de generadores eléctricos ubicada en la popa dejó al barco a la deriva.
Según las imágenes que transmiten en directo las televisiones italianas, la nave entró en el puerto de Mahé a las 5.00 horas GMT y después se han necesitado dos horas para acercarla al muelle.
Durante este tiempo, se desembarcaron las maletas para que los pasajeros puedan salir del barco sin problemas, después de haber pasado tres días en duras condiciones, en los que han dormido en las cubiertas al aire libre, debido al calor que había dentro del barco, se han lavado con agua mineral y han comido alimentos fríos.
El diplomático italiano de la embajada de Nairobi Alberto La Bella explicó que todos los representantes de los países que tienen pasajeros en el barco han apreciado la organización del desembarco.
En el puerto están las autoridades de las islas Seychelles, así como representantes de cada país que se encargarán de acoger a los pasajeros y personal de la Cruz Roja por si es necesario atender a alguien, aunque ya se informó de que todos los viajeros están perfectamente.
Según informó hoy en un comunicado la naviera, Costa Cruceros, por el momento 376 turistas que viajan en la embarcación han aceptado la oferta de continuar sus vacaciones una o dos semanas en el archipiélago del Índico con todos los gastos pagados por la compañía, así como el vuelo de regreso a casa. Mientras que los otros pasajeros del barco han decidido, por el contrario, volver a casa con vuelos dispuestos por Costa Cruceros que saldrán desde la isla de Mahé, en las Seychelles, en la tarde-noche de mañana.
A bordo del barco viajan 636 pasajeros de diversas nacionalidades y 413 tripulantes. Entre ellos 15 españoles, entre ellos tres catalanes (uno de Girona y dos de Vic), cuatro de Las Palmas de Gran Canaria, dos de Cádiz, tres de Ibiza, dos de A Coruña y uno procedente de Madrid. Todos ellos están siendo atendidos y se encuentran "en perfecto estado" como el resto del pasaje.
Una de las pasajeras españolas afectadas por el incidente del Costa Allegra ha reconocido haber pasado "un susto grande" cuando tomó conciencia de que el buque en que viajaba se encontraba a la deriva, aunque ha señalado que "lo más duro fue cuando se quemaron los generadores". En declaraciones a Radio Nacional, recogidas por Europa Press, la viajera reconoció, no obstante, la "buena" labor de la compañía y la tripulación. "Lo han hecho bien, porque más no podían (hacer)", ha dicho.
El incendio en el Costa Allegra se ha producido un mes y medio después del naufragio del Costa Concordia (también propiedad de Costa Cruceros) frente a la isla italiana de Giglio, que dejó 25 muertos y 7 desaparecidos.