Pedro Almodóvar es muy querido en Hollywood. Después de conquistar la meca del cine tras alzarse con dos Oscar, el cineasta manchego se mueve como pez en el agua en cualquier fiesta que se precie en Estados Unidos. Pese a que su última película no ha sido preseleccionada para los Oscar, el director no dudó en organizar una fiesta en Nueva York con motivo de la promoción de su película La piel que habito. Madonna, que ha vuelto a probar suerte como directora con la película W.E., fue una de las que no quiso perderse la proyección de la nueva cinta de Almodóvar y acudió a la velada acompañada de su novio, el bailarín Brahim Zabat, y de su ex pareja y padre de su hija Lourdes, Carlos León.
De director a directora, Pedro y Madonna charlaron animadamente como un par de amigos encantados de volver a verse. La amistad de Almodovar y la reina del pop se remonta más de veinte años atrás. El director de cine le organizó una velada a Madonna en 1990 durante su tour Blond Ambition en el hotel Palace de Madrid. Por aquel entonces se dijo que el deseo de la ambición rubia en aquella cena era conquistar a Antonio Banderas, aunque la cantante no contó con que el actor malagueño estaba casado con Ana Leza, y no estaba interesado en ella. Ahora veintiun años después, Madonna apareció felizmente acompañada de su novio en la fiesta a la que también acudió Antonio Banderas.
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