Apenas quedan diez días para la boda más esperada, y sin embargo sus protagonistas parecen estar de lo más tranquilos a pesar de la gran expectación que les rodea. La duquesa de Alba y Alfonso Díez se han reunido este fin de semana en el palacio de Dueñas de Sevilla para ultimar los preparativos de su enlace, que se celebrará allí mismo el próximo 5 de octubre.
Doña Cayetana, que ya se ha hecho la primera prueba del vestido de novia que le han diseñado los modistos Victorio y Lucchino, del que no quiere desvelar nada para que sea una sorpresa, disfrutó de una relajada mañana en compañía de unas amigas. Junto a ellas acudió a recibir un premio como presidenta de honor de Nuevo Futuro por su colaboración con la Asociación. Doña Cayetana recogió su medalla y recibió, emocionada, los aplausos de los presentes. No la acompañó Alfonso, que llegó a la capital hispalense el viernes.
Precisamente ese día, la duquesa acudió a hacerse la primera prueba de su vestido y después a la fábrica de La Cartuja para supervisar la vajilla en la que comerán los invitados a su boda. Doña Cayetana está controlando personalmente todos los detalles de su enlace, desde el papel de las invitaciones hasta los menús, para que todo esté en orden para el gran día.
El domingo, la duquesa acudió con Alfonso a la plaza de toros de La Maestranza para presenciar la última corrida de la feria de San Miguel y ver torear a Curro Díaz, José María Manzanares y Julían López 'El Juli', mostrando así su apoyo incondicional a la fiesta el mismo día en que se celebraba la última corrida en La Monumental de Barcelona.
Muy sonrientes y relajados les vimos a su llegada a la plaza para disfrutar de una tarde de toros. Allí la pareja recibió las felicitaciones por su próxima boda de todos los sevillanos. La aristócrata salía de La Maestranza del brazo de Alfonso, mostrando su pena porque la fiesta taurina haya terminado en la Ciudad Condal. Ambos guardan silencio sobre su boda, que ha despertado un gran interés no sólo en nuestro país sino también fuera de nuestras fronteras.
Cayetana y Alfonso apuran sus últimos días como solteros en Dueñas, donde se han reunido con Carmen Tello y Curro Romero. Como madrina de la boda, Carmen está muy volcada en los preparativos del que será el gran acontecimiento del año en Sevilla. En declaraciones al Diario de Sevilla, Carmen ha dado algunos detalles de la ceremonia, que será en la capilla de Dueñas: "Curro será testigo y se servirá un almuerzo tipo bufé de pie con sillas para sentarse. Después la pareja saldrá a saludar a los medios y al público que se acerque al palacio a compartir su felicidad". Sobre el vestido de la novia, Carmen aventura que "será en tono pastel, azul o rosa claro o asalmonado", mientras que el suyo "será rojo Valentino, largo, con un poquito de escote -para que se le vea el encaje- y sencillo", con mantilla blanca a petición de la duquesa. Su regalo de bodas será un traje de Curro Romero: "Tenía esa ilusión y no podíamos dejarle con las ganas. Quiere prepararlo en una vitrina.", ha declarado su esposa.