Los restos mortales de Luis García Berlanga descansan ya en el cementerio madrileño de Pozuelo de Alarcón. Pese a la lluvia, numerosos amigos y compañeros de profesión se han acercado al camposanto para mostrar sus respetos y rendir su último homenaje al cineasta en una emotiva ceremonia que ha concluido con una gran ovación y gritos de "¡Viva Berlanga!". La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde; la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y los actores Willy Montesinos y Concha Velasco han sido algunas de las personalidades públicas que han acudido para dar el último adiós a este mito del cine.
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A las 15.00 horas, el cuerpo sin vida de Berlanga ha sido enterrado en la sepultura donde descansa su hijo Carlos, uno de los iconos de la música española de los años 80, fallecido hace ocho años. Al pie de la sepultura, su hijo José Luis ha tenido palabras de agradecimiento para la Academia de Cine y los medios de comunicación, así como para los amigos que han acompañado a la familia en los últimos días.
La capilla ardiente del director se instaló ayer en la sede de la Academia del Cine. Hasta ella se acercaron el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, actores como Rosa María Sardá o José Sacristán, directores como Icíar Bollaín o Pedro Almodóvar (gran amigo del fallecido) o el presidente de la Academia, Alex de la Iglesia.
Luis García Berlanga falleció a los 89 años en su casa de Madrid. Según declaró un portavoz de la familia, el cineasta se fue "tranquilamente" y rodeado de sus más allegados. El autor de películas tan memorables como La Escopeta nacional, El verdugo, La Vaquilla o Bienvenido Mister Marshall sufría la enfermedad de Alzheimer.