El director de cine francés Thomas Balmès ha estrenado en Estados Unidos un documental que muy probablemente dará la vuelta al mundo. “Babies” cuenta en una hora y cuarto la historia de cuatro bebés, desde que nacen hasta que dan sus primeros pasos. La película cuenta las diferentes vidas de estas pequeñas estrellas en lugares tan distintos del planeta como Estados Unidos, Japón o Namibia. Una visión de cómo es el mundo, desde la perspectiva de estos cuatro adorables niños. Porque nacer en un lugar u otro condiciona muy directamente cómo será cada una de sus vidas.
Ponijao nació en un pueblo de de agricultores en Namibia, Bayarjargal proviene de una familia de pastores mongoles, los padres de Mari son dos jóvenes japoneses de Tokio, y Hattie nació en San Francisco. Dos niños pobres y dos ricos.
Mientras Hattie se balancea en un columpio en San Francisco, Mari tiene una pequeña rabieta, Bayarjargal, en Mongolia, observa con atención a un gallo junto a su cama. Al otro lado del mundo, en Namibia, Ponijao juega con un montón de piedras.
El documental, que ha arrancado numerosas exclamaciones de ternura entre los espectadores estadounidenses, está narrado en clave emotiva, y da de lleno en el corazón al mostrar las diferencias y las hazañas de estos cuatro pequeños.
Además, el espectador se encariñará fácilmente de ellos, ya que poco a poco empiezan a mostrar su personalidad, y las cámaras asisten a muchos momentos entrañables, como la primera vez que escuchan música o dan un pasito. “Para un recién nacido todo es una gran aventura. Cuando de pronto consiguen ponerse de pie, es tan asombroso, que uno necesita celebrarlo y aplaudir. Es el auténtico momento Indiana Jones. Los espectadores exclaman ‘¡Sí!’, aunque se trate solamente de un bebé de pie”, ha declarado dicho Balmès al diario estadounidense The New York Times.
“Cuando la gente vea el documental”, ha añadido, “espero que se den cuenta de que no solo trata sobre bebés. Trata sobre ser un ser humano en el mundo”.