Michael y Diandra Douglas, unidos en defensa de su hijo condenado a cinco años de prisión
Cameron Douglas, además de cumplir condena, deberá pagar 18.500 euros y pasar otros 5 años en rehabilitación
Todos los esfuerzos no han bastado para Michael Douglas y su ex mujer, Diandra. Su hijo, Cameron, de 31 años, ha sido condenado a cinco años de prisión por tráfico de drogas. El joven compareció ayer en el juicio celebrado en Nueva York y se declaró culpable de los cargos que se le imputan y pidió disculpas al tribunal por su conducta y por haber desperdiciado las oportunidades para alejarse del mundo de las drogas. Acompañado por sus padres, Michael Douglas y Diandra, el nieto de Kirk Douglas tendrá que estar hasta los 36 años en prisión, cumplir 450 horas de trabajo comunitario, pagar 18.500 euros y tras cumplir la condena deberá permanecer cinco años más en libertad vigilada cumpliendo un programa de rehabilitación.
Con semblante serio, abandonaron la corte sin querer responder a las preguntas de los periodistas. Antes del juicio, su padre, Michael Douglas, su madre, Diandra, su abuelo Kirk Douglas y Catherine Zeta-Jones escribieron al juez, Richard Berman, pidiendo clemencia. Michael Douglas, en su carta al juez, decía: "Cameron viene de una familia de estrellas de cine y adictos. Lleva desde los 13 años abusando de sustancias y le influyó mucho mi fallido matrimonio con su madre, Diandra. Además, yo por mi trabajo era un padre que estaba siempre ausente. Soy consciente de que es un adulto dueño de sus actos. Pero los genes también pesan. Yo tengo alguna idea de lo que es vivir con la presión de tener un padre muy famoso".
Catherine también salió en defensa de Cameron al que calificó de ser "un hermanastro maravilloso para Dylan y Carys", los hijos que ha tenido con Michael Douglas. Por último Kirk, de 93 años, envió una carta al tribunal para que el castigo del juez fuera lo más indulgente posible.“Amo a Cameron. Estoy convencido de que puede convertirse en un gran actor y espero llegar a verlo antes de morir".
Al leer la sentencia Berman declaró que tuvo en cuenta las cartas recibidas sobre el comportamiento y la personalidad del joven, al que advirtió que ésta es su última oportunidad para conseguir dejar las drogas.