Lolita no ha podido tener un mejor comienzo para su nueva aventura profesional. En su día de estreno llenó el Teatro Häagen-Dazs Calderón de Madrid. No faltó ninguno de sus incondicionales, tan sólo su hija Elena, que se encuentra de vacaciones en Cuba.
Con un vestido de volantes blanco, la cantante llenó de luz el escenario en este autohomenaje que supone 'De Lolita a Lola'. Es la mejor forma de celebrar 35 años dedicados a la música, cantando cada noche desde el 13 al 21 de marzo en la capital española.
Poco antes de que comenzara el recital, llegaba visiblemente nervioso y emocionado su futuro esposo, el actor Pablo Durán. Tampoco faltó otro de los hombres de su vida y padre de sus hijos, Guillermo Furiase. El argentino puso de manifiesto, una vez más, el cariño y respeto que lo unen a su ex mujer: "Le deseo lo mejor, sobre todo porque ha pasado una Navidad muy mala", dijo en referencia al cáncer de útero del que la artista se está recuperando.
En representación de la familia flores acudió su hermana Rosario y su sobrina Alba Flores -acompañada por su madre, Ana Villa. Y entre los amigos se encontrabanm Pastora Vega, Rosario Mohedano, Massiel, Carmen Sevilla, Juan 'El Golosina' y el actor Pedro Osinaga con su mujer.
Muchos de ellos también acudirán a la próxima boda de la hija mayor de Lola Flores. La artista le dará el 'sí, quiero' a Pablo Durán a mediados de mayo, tras cinco años de relación. Al parecer, Lolita ya ha elegido su traje de novia, con el que ha prometido que nos va a sorprender pero por el momento es su espectáculo el que reclama toda su atención.