El escenario de la Quinta Vergara ha invitado un año más a artistas de todo tipo y condición para que hagan de este festival de Viña del Mar algo inolvidable. En la jornada inaugural la veteranía llegó de la mano de Paul Anka, que pisaba por primera vez el certamen y cantó sus grandes éxitos, mientras que el humor llegó de la mano de Coco Legrand. Anahí, ex componente de RBD, se presentó en Chile con la firme intención de proclamarse reina y para ello desplegó todo su arte.
En su repertorio sonaron antiguos temas de RBD y otros de su nuevo trabajo en solitario Mi delirio, con el que se encuentra en plena gira y del que está muy orgullosa. “Estoy feliz porque ahora estoy componiendo mis canciones, me junto con los productores que yo realmente quise, me visto como yo realmente quiero, estoy chequeando todo lo de mis conciertos, absolutamente involucrada en todo" comentó en declaraciones telefónicas al programa radiofónico Dial Tal Cual. Y es que su gira la llevará en los próximos meses a Serbia, Rumanía, Eslovenia y España. Sin embargo no convenció mucho al público, auténtico jurado del festival, que no le pidió un bis.
Junto a ella, actuaron Don Omar y el pop de Reik, que dejarán paso en los próximos días a Raphael, que interpretará un dúo con Beto Cuevas, los argentinos Miranda, Tito el Bambino, Ricardo Arjona, Fanny Lu y la Noche, Los fabulosos Cadillacs y Beto Cuevas, esta vez solo. Todos ellos se someterán al veredicto del Monstruo, como se denomina al público que decide con sus ovaciones si el artista se lleva las preciadas Gaviotas de oro y plata.
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