Manuel Segura, padre de Borja Thyssen: 'Todo lo que tiene Borja se lo debe a Tita'

por hola.com

Manuel Segura, padre de Borja Thyssen, acudió el pasado viernes al programa de televisión Sálvame de Luxe, que se emite en Tele 5, para hablar por primera vez sobre su relación con Borja, Carmen Thyssen y los difíciles momentos familiares con demandas ante los tribunales incluidas.


Es la primera vez que Manuel Segura, que asistió a la boda de Borja con Blanca Cuesta y posó con ellos en exclusiva para la revista ¡HOLA!, habla sobre su relación con la familia Thyssen y explica como se ha ido afianzando su cariño con Borja que fue adoptado por el barón Heini Thyssen, marido de Carmen. “A Borja –dijo- lo quiero un 80 por ciento de amigo y un 20 por ciento de padre. El cariño se hace con el trato. Conmigo siempre ha sido muy cariñoso, siempre nos damos dos besos”.


“Mi relación con Borja empezó cuando tenía seis o siete años. Vinieron a verme la madre y el hermano de Carmen a Marbella y me dijeron que Tita y el Barón iban a casarse y que él quería adoptar al niño. Yo les dije que hicieran lo mejor para el niño. Al principio tuve poca relación, lo vi con un año y luego cuando ya tenía dos”. Los contactos con el niño se normalizaron cuando Borja había cumplido los ocho: “Yo he tenido bastante relación a partir de los ocho años, luego él paso una temporada en Lugano, pero a los ocho casi todos los sábados me llamaba la madre de Tita y le iba a buscar, jugábamos al pádel en la Moraleja”.


Manuel recordó también como le dieron a Borja la noticia de que él era su padre: “El niño tenía siete años y Tita nos reunió Tita en Marbella a Heini, el niño, ella y yo y le dijo: “Borja, Manuel es tu papá, tienes dos papás y tiene mucha suerte de tener dos papás...uno rico y uno guapo”.

Borja, sin embargo, nunca le ha llamado papá. Explicó también como llegaron a la decisión de que Carmen fuera madre soltera: “La relación estaba ...no estaba bien. Hablamos y decidimos no casarnos y, de mutuo acuerdo, no darle mis apellidos. En la vida lo que no hay que ser es falso, a mi los niños nunca me han enloquecido”.

A pesar de que él mantiene buena relación tanto con Carmen como con Borja le preocupa el distanciamiento entre madre e hijo: “Está claro que Tita no le tiene mucha simpatía a Blanca pero en Marbella salíamos a comer juntos. Había una cierta tirantez, hay que entender que es una madre con un hijo único, que ha luchado por Borja todo lo que ha podido, todo lo que tiene Borja se lo debe a Tita

Y dio a entender que a la Baronesa le hubiera gustado más que su hijo hubiera elegido a una aristócrata: “A veces una madre quiere para su hijo lo mejor y quizá no le parece suficiente lo que ha hecho”. Luego añadió: “A mi Blanca me parece una chica normal y Borja es feliz con ella. Les veo felices, jugando con su hijo y contentos. Blanca no dice nada y aprecia el que yo intente limar asperezas. Yo he estado con ellos en Ibiza, en San Feliú, en Marbella,..No estoy todos los meses del año, pero cuando estoy con ellos, los veo normal”. Por último, defendió la educación que Carmen ha dado a su hijo: “Creo que educar es muy difícil y que debería haber estudiado más, pero también pienso que Tita que le quiere con el alma, se ha desvivido por conseguir para él un futuro. Ella en esa etapa tenia muchos viajes, tenía que acompañar al Barón y Borja tenia una sobreprotección de hijo único con dinero, con miedo a que lo raptasen”.