Cenar con Sarah Palin es posible... a partir de los 25.000 euros
Una subasta ofrece una cena con la ex candidata a la vicepresidencia de Estados Unidos / Los beneficios irán a parar a una organización en favor de los veteranos de guerra heridos
Cenar con una de las candidatas a la vicepresidencia más célebres de la historia de EE.UU. es un capricho caro, al menos si se consigue a través de eBay, plataforma que pide al menos 25.000 euros por una velada con Sarah Palin, según publica Efe.
Pero parece que hay quien está dispuesto a desembolsar. Horas después de lanzarse en la popular red de Internet la subasta, que permanecerá abierta al menos durante 10 días, ya había recibido 13 ofertas, la más alta por 37.500 dólares.
La lujosa cena con la ex gobernadora de Alaska no será íntima, puesto que también asistirá su marido, Todd, y otros cuatro comensales que elegirá quien gane la subasta, según informó la cadena CNN.
Todos los beneficios que se recauden a través de eBay irán a parar a Ride 2 Recovery, una organización benéfica que proporciona bicicletas y otras formas de transporte a veteranos de guerra heridos, informa la agencia.
"La ex gobernadora está feliz de que le hayan pedido contribuir de esta forma a honrar a los veteranos de nuestro país", dijo la portavoz de Palin, Meg Stapleton.
El éxito inicial de la invitación a cenar con Palin ha provocado la aparición de otras subastas para encuentros con políticos, como la que pide un mínimo de 7.500 dólares por una velada con el que fuera consejero del ex presidente George W. Bush, Karl Rove.
Una buena forma de recaudar fondos
Pero Sarah Palin no es la primera en prestarse a este tipo de iniciativas. Una de las actrices más solicitadas y sexys de Hollywood, Scarlett Johansson, puso su granito de arena en la organización Intermon Oxfam subastando una cita el pasado año. El afortunado pujador la acompañó a la première de su película "He’s Just Not That Into You", en Los Angeles: una auténtica noche de estrellas.
La experiencia debió de gustar a la cantante, que a comienzos de este año, sacó a puja nada más y nada menos que un pañuelo, recién sonado por ella. En esta ocasión, la idea fue improvisada. Johansson acudió como estrella invitada al popular show de Jay Leno (por el que desfilan los artistas más exitosos) y contó que se encontraba resfriada, ya que en el rodaje de su última película, “The Spirit”, el actor Samuel L. Jackson le pegó un catarro. El presentador le ofreció un pañuelo y bromearon ante la idea de subastarlo. La diva hollywoodiense no lo dudó, lo metió en una bolsita sellada y estampó su autógrafo. Días después el pañuelo consiguió recaudar más de 5.000 dólares, unos 3.000 euros, que se emplearon en repartir comida y juguetes con la organización USA Harvest.
Pero Johansson no es la única. Otra de las actrices más despampanantes de Estados Unidos, la ex socorrista de la playa Pamela Anderson, también se subastó por una buena causa. Ofreció una cena al mejor postor para cumplir los deseos de 39 niños con enfermedades terminales. La subasta ocurrió en Abu Dabi (Emiratos Árabes).
Pero sin duda, la subasta más dulce fue la que protagonizó el pasado mes de abril la supermodelo Kate Moss: un beso. Y eso, de parte de una de las tops más cotizadas de la actualidad, vale lo suyo: nada más y nada menos que 5.000 euros. Doble satisfacción para el ganador, ya que el objetivo era recaudar fondos para un hospital londinense. También el actor Orlando Bloom y la diseñadora Sadie Frost (ex mujer de Jude Law), contribuyeron con más besos solidarios.
Más famosos “en venta” por un rato: la cantante Shakira subastó el año pasado una cena, recuerdos de conciertos y varias prendas de ropa para financiar los proyectos de la fundación que ella misma creó, Pies Descalzos.
También el actor Kevin Kostner se ha unido a la moda de las pujas y ha subastado una cena al mayor postor en beneficio de la familia de un fallecido por un terrible vendaval durante un festival de Canadá. Conmocionado por la tragedia, el actor no dudó en ayudar a la familia.
No obstante, la cena más cara del mundo no corresponde a ningún actor ni estrella de Hollywood, sino al hombre más rico del mundo, Warren Buffet. Este año, un inversor anónimo pagó la friolera de 1,19 millones de euros en una subasta realizada a través de eBay, con la que cenará, acompañado de las siete personas que elija, en un elegante restaurante en Nueva York. Los fondos irán a parar a la Fundación Deslizarése, una organización no lucrativa de San Francisco que presta ayuda a los desfavorecidos.