Seguro que alguna vez te ha pasado. Tienes que salir del avión, recoger las maletas, pasar el control de pasaportes, y por fin, llegar hasta su casa, después de muchas horas entre vuelos y aeropuertos. Cuando buscas las gafas para leer algo ya en casa, te das cuenta del fatal desenlace, has olvidado la funda de las gafas en el avión. Bueno, es un problema menor, pero ¿a qué nunca habías pensado que pasaría con esa funda de gafas que olvidaste en el avión? ¿O con el cartón de tabaco que colocaste debajo del asiento y con las prisas te olvidaste?
Todos esos objetos que por una razón u otra se quedaron en algún avión, saldrán a subasta el próximo día 4 de junio como vienen haciendo desde hace décadas, en uno de los hangares del aeropuerto de Barajas. Organizada por Iberia y de participación pública, se podrá pujar por teléfonos móviles, maletas, enseres de baño, calzado y demás accesorios que muchos viajeros abandonaron en las bodegas de sus aviones o que nunca recogieron en la cinta de maletas cuando llegaron a sus destinos.
La subasta está compuesta por un lote de lo más variado. Entre los objetos, destacan 55 productos de alimentación, 157 botellas de distintas bebidas, artículos de viaje, productos de bricolaje, de aseo personal, gafas de sol, fundas de gafas, diferentes modelos de paraguas, 718 artículos de joyería y bisutería, 664 juguetes, 1.570 artículos de imagen y sonido, 38 cartones de tabaco, 386 teléfonos móviles y distintos complementos de ropa.
Según ha podido saber hola.com, la subasta se celebrará a puerta cerrada, para mantener la intimidad de los compradores. Hasta el día tres de junio, los lotes se mantendrán expuestos en el hangar utilizado por la compañía para tal evento. El dinero recaudado servirá para poder sufragar los gastos de la subasta y la cantidad restante, se entregará al Ministerio de Fomento, tal y como dicta la legislación vigente.
Los objetos, no pertenecen necesariamente a clientes de la aerolínea que olvidan recogerlos o que por descuido pierden. También forman de estos lotes, los objetos que pasajeros pierden en aeropuertos y que Iberia recoge al ocuparse del mantenimiento de los mismos.
Esta subasta se efectúa en cumplimiento de lo dispuesto en la orden del 25 de noviembre de 1942 sobre normas para la enajenación para los objetos y mercancías no recogidos o abandonados por los viajeros, expedidores o consignatarios, según publica el Boletín Oficial del Estado.