Penélope Cruz, con un vestido negro de plumas de alta costura de Chanel, complementos de Roger Vivier y joyas de Chopard, cautivó a su paso por la alfombra roja de la 80ª edición de los Oscar. Bardem no se quedó atrás. Pero no obstante evitaron en todo momento aparecer juntos en la velada. Tal vez habrá que esperar a las fiestas posteriores para poder lograr la ansiada fotografía de ellos juntos, aunque para ambos uno de los principales objetivos es no convertirse en el objetivo de los fotógrafos.
Mientras el actor español, que eligió sentarse con su madre en el patio de butacas del teatro Kodak, recogió el Oscar al mejor actor de reparto por No es país para viejos, Penélope Cruz minutos más tarde ejerció como presentadora de la gala y entregó el Oscar a la mejor película de habla no inglesa que fue a parar a la austriaca Los falsificadores.
Numerosos presentadores desfilaron por el teatro Kodak para entregar los galardones en las 25 categorías, incluida el Oscar honorífico para Robert Boyle. Como manda la tradición, los ganadores de pasadas ediciones ahí estaban para entregar el Oscar a los nuevos galardonados y fue Jennifer Hudson quien le entregó a Bardem el premio.