Durante años fue considerado como uno de los guapos de Hollywood y reclamo para quinceañeras, pero el tiempo pasó y este actor norteamericano también se hizo mayor. Y, además, consiguió ir evolucionando en sus interpretaciones hacia trabajos cada vez más complejos. Por este motivo, a su 42 años, el Festival Internacional de Cine de San Sebastián le ha galardonado con el Premio Donostia a su larga trayectoria cinematográfica.
Y es que , pasada la cuarentena, Dillon acumula a sus espaldas más de 25 años de carrera profesional y unas 40 películas, entre las que destaca City of ghosts su primer trabajo como director. Debutó a los quince años en la película de Jonatahn KaplanOver the Edge y desde entonces fue encadenando un trabajo tras otro.
Al subir al escenario para recoger el premio Donostia, que le fue entregado por la actriz española Lucía Jiménez y el pintor y director Julian Schnabel, el actor norteamericano afirmó: "Es un honor para mí recibir el premio, pero me resulta un poco extraño cuando sólo he llegado al punto medio de mi carrera", aunque consideró un gran honor este galardón y más en un país con tanta tradición cinematográfica.
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