Bruce Paltrow, padre de la conocida actriz Gwyneth Paltrow, ha fallecido repentinamente en Roma a los 58 años de edad, al parecer como consecuencia de complicaciones derivadas de una neumonía.
El director y productor estadounidense se encontraba en Italia desde hacía varios días donde había viajado acompañando a su hija, quien debía cumplir con algunos compromisos profesionales. Precisamente la protagonista de Shakespeare enamorado, a la recientemente pudimos ver en la Semana de la Moda de Nueva York, asistió en Milán a la brillante gala benéfica celebrada a favor de Child Priority -organización que se ocupa de ayudar a los niños necesitados-, además de presenciar algunos desfiles de moda; aprovechando su estancia en el bello país transalpino, Gwyneth y Bruce Paltrow habían visitado Florencia días antes, donde fueron vistos realizando algunas compras, lo que nada hacía presagiar el trágico desenlace.
Gwyneth Paltrow siempre se ha sentido muy unida a sus progenitores, ambos rostros conocidos del mundo del espectáculo - su madre es la actriz Blythe Danner y su padre, como hemos mencionado era productor y director de cine y televisión y guionista casual- , pero mantenía una relación muy especial con su padre, con el que había trabajado en Duets.
Es difícil olvidar el momento en el que la actriz recibió el Oscar por su papel en Shakespeare enamorado en 1999. La ex novia de Brad Pitt subió al escenario enfundada en un magnífico vestido rosa y entre lágrimas de emoción le dedicó el premio a su padre -presente en el auditorio- quien dijo, estaba atravesando momentos muy difíciles tras haberle sido diagnosticado un cáncer de garganta.
Recientemente, en una entrevista publicada en la revista ¡HOLA!, Gwyneth Paltrow recordaba ese momento y afirmaba que no le gusta su Oscar ni lo que representa: "En esos momentos de mi vida sufrí unos acontecimientos familiares terribles. Mi padre sufría cáncer y se alimentaba mediante un tubo. Todo ese período durante el que recibió el Oscar por Shakespeare enamorado, y cuando rodaba El talento de Mister Ripley en Italia, es decir, lejos de la gente a la que quería, y que estaba enferma, es para mí un mal recuerdo. Estaba muy triste".