Salvando las distancias, Brendan Fraser se ha convertido, gracias a su papel de intrépido aventurero de la Legión Extranjera francesa, en el relevo generacional de Indiana Jones. No hay duda de que el público demandaba un tipo de cine, el de aventuras, que el director Stephen Sommers supo plasmar en La momia (1999) y que ha retomado en la segunda parte, El regreso de la Momia. La acción, los efectos especiales, y la ambientación histórica -la cultura egipcia, pirámides, maldiciones y leyendas- ayudaron al éxito de la película, no hay duda. Pero la elección de los personajes y de los actores que les han dado vida, también fue un acierto en la diana. Con su corpulencia y atractivos físicos, Brendan ha conseguido encarnar al perfecto héroe cinematográfico, aquel que, intrépido y valiente, siempre termina salvando a la chica. Y, gracias a Rick OConnell y a su particular Momia, Imnothep, el actor ha conseguido llegar a la cúspide de la pirámide del éxito.