Vicky: ‘Cuando se ha querido tanto como yo a Manuel cuesta iniciar otra relación’

Por hola.com

Vicky Martín Berrocal entregó en Madrid uno de los premios ‘Pide un Deseo’, en el transcurso de una fiesta organizada con ocasión del 75 aniversario de la empresa El Serpis. El acto fue presentado por la popular Anne Igartiburu (Corazón de invierno) y el diplomático y escritor Fernando Schwartz (Lo más plus).

Tras la entrega de premios, de carácter benéfico, al que seguiría una cena, Vicky Martín Berrocal nos habló de su trabajo y de su vida, en especial de su separación de Manuel Díaz "El Cordobés" y de la relación que ha iniciado hace algún tiempo con el futbolista Denilson.

—Dentro del lema de la fiesta —‘Pide un deseo’—, ¿cuál es el deseo o el sueño de tu vida?
—Mi mayor sueño, cuando era niña, era enamorarme de un hombre y pasar por el altar, y que mi padre estuviera conmigo ese día. Ese sueño se cumplió. Hoy mi sueño es que mi hija tenga mucha salud y que los míos estén bien. También pido salud para Manuel, al que adoro; que le vaya todo muy bien, porque se lo merece, ya que es un pedazo de hombre y un pedazo de torero.

—Es curioso, Vicky: siempre hablas de que os lleváis de maravilla...y como si no hubiera pasado nada. Pero las separaciones son dolorosas, ¿o no lo fue la vuestra?
—Por supuesto que lo fue. Tomar la decisión de separarse claro que es duro, muy duro. Ha sido la decisión más complicada y más difícil a la que me he tenido que enfrentar en mi vida. Y, por supuesto, no fue algo de la noche a la mañana. Éramos una familia, ya que tenemos una hija, y ya no era por nosotros, era, sobre todo, por ella. Pero llegó un día en que nos dimos cuenta de que no era viable nuestro matrimonio.

"El tiempo dirá"
—¿Y cómo estás ahora? Se te ve contenta y feliz junto a Denilson. ¿Se puede concluir que estás enamorada?
—Enamorada no lo estoy. Ha pasado muy poco tiempo desde mi separación. Acaso en una pareja que ha salido a matar pueda producirse un enamoramiento rápido por parte de uno de los dos. Pero ése no ha sido nuestro caso. Lo que sí estoy es ilusionada. Aunque debo decir que, cuando se ha querido tanto, cuesta mucho más comenzar otra relación.

—Pero la has comenzado, ¿no?
—Sí. Estamos hablando, nos estamos conociendo, salimos muchas veces a cenar con amigos. Ahí estamos. Hay que darle tiempo al tiempo.

—Manuel, por su parte, sale con una chica venezolana. Dinos algo al respecto.
—Sólo puedo decir que tiene que ser una chica maravillosa. No la conozco, pero tiene que ser —es un deseo —maravillosa, porque al lado de Manuel no puede haber nada malo. Si hay alguien en su vida, lo que quiero es que le haga feliz, que jamás le haga sufrir, que lo trate como Manuel se merece. Conozco bien a Manuel. Es un hombre muy especial, y sé que si está con una mujer es porque esa mujer será estupenda.