Empezad por pensar qué tipo de pareja sois, qué os gusta hacer juntos, cuáles son los planes que más os llenan o si os mueve más la aventura o la comida. Eso os permitirá descartar unos destinos y elegir los que más se adapten a vuestros gustos, porque hay tantos tipos de viajes como de parejas. Seguro que alguno de los que os proponemos encajan con vuestro estilo.
PARA PAREJAS AVENTURERAS: LAPONIA FINLANDESA
Apasionados por explorar, hay miles de lugares donde vivir experiencias inolvidables, pero la de combinar el lago Inari, que permanece helado de noviembre a junio, la estación invernal de Saariselkä y el entorno de Rovaniemi, promete. En invierno, en la Laponia finlandesa confluyen la nieve en sus espesos bosques, el silencio y las brillantes auroras boreales que encienden el paisaje ártico. Una experiencia romántica añadida es contemplarlas desde la cama de los iglús de hielo de Kakslauttanen Arctic Resort (kakslauttanen.fi) o en el trineo Aurora Bubble (offthemap.travel). En la página web del Instituto Meteorológico de Finlandia: Auroras now! (aurorasnow.fmi.fi) os podéis inscribir para recibir alertas gratuitas que hacen posible ver las auroras.
PARA PAREJAS DEPORTISTAS: ANDORRA
Recorridos por paisajes nevados, esquí, tardes de relax con masajes para dos en un spa, cenas a la luz de las velas y… las noches ¡en un iglú! En el centro de Grandvalira, en el sector Grau Roig y a 2350 metros de altitud, está el Domo Lodge, un alojamiento al que solo se puede llegar esquiando y en raquetas de nieve ideal para parejas deportistas y que buscan lugares fuera de lo convencional, porque la estancia incluye aperitivo de bienvenida con productos del país, cena, desayuno y salidas con guías de montaña o clases de esquí con monitor.
PARA PAREJAS ROMÁNTICAS: LISBOA
La capital portuguesa es mucho más que una ciudad inspiradora, es la escapada perfecta para un fin de semana romántico, que por algo ha sido elegida en los premios World Travel Awards como la mejor del mundo para un city break. Todo en ella derrocha encanto, desde sus calles empedradas a sus miradouros, sus edificios de color pastel o los viejos tranvías que suben y bajan por sus colinas. Difícil no caer rendido a Lisboa, al estilo de vida portugués y al embrujo de sus barrios: el histórico Alfama, la magnética Ribeira o el animado Bairro Alto en cuyos bares la noche suena a fado.
PARA PAREJAS ENAMORADAS DE LA NATURALEZA: TENERIFE
No os hará falta escaparos muy lejos para hacer lo que realmente os gusta: estar juntos disfrutando de la naturaleza. Y Tenerife tiene espacios naturales impresionantes para disfrutar con buen tiempo. Podréis subir al Teide, el techo de España y tercer volcán más alto del mundo, tomar el sol en la playa volcánica de Benijo, observar las acrobacias de los delfines junto al acantilado de los Gigantes o recorrer los senderos escoltados por la laurisilva del Parque Rural de Anaga, un espacio natural al que asoman acantilados, roquedos picudos, barrancos y carreteras panorámicas para disfrutar en una escapada inolvidable. Para alojaros, dos buenas opciones: el hotel rural Costa Salada (costasalada.com), desparrado por un acantilado del valle de Guerra, y, en pleno casco antiguo de La Laguna, la mansión Laguna Nivaria (lagunanivaria.com).
PARA PAREJAS GOURMET: TURÍN
La capital del Piamonte tiene arte, arquitectura, plazas y palacios donde revivir la historia, museos únicos… y una magnífica gastronomía. No es una de las más conocidas de Italia, pero si sois de esas parejas que se mueve por el estómago, Turín es un destino de primera y lo corroboran sus numerosos mercados, sus restaurantes con estrellas Michelin y de filosofía slow food, heladerías, cafés míticos y el centro gastronómico Eataly, una experiencia foddie 360º. Por si faltaran excursas, en Turín se inventó el vermú hace dos siglos, que podéis probar en locales como el Bar Concord o el Bar LAB.
PARA PAREJAS TRANQUILAS: KARLOVY VARY
Chequia entera está surcada por manantiales, pero la mayor concentración de aguas curativas se encuentra en el famoso “triángulo de los balnearios” en la zona de oeste de Bohemia. La joya de este triángulo es la ciudad de Karlovy Vary, con sus ostentosas columnatas y exclusivos sanatorio en una situación geográfica privilegiada en medio de un valle cubierto de bosques. Un entorno ideal para las parejas tranquilas que buscan relax en sus balnearios combinados con distendidos paseos por el casco histórico que bordea el río Teplá, a la sombra de las elegantes columnatas que protegen los manantiales de aguas, sin olvidar pasar frente al edificio del teatro, los Baños Imperiales o de la iglesia de Santa María Magdalena.
PARA PAREJAS CULTURETAS: TARTU
Mucho se va a hablar este 2024 de Tartu, la segunda ciudad más grande de Estonia y la más antigua de los países balcánicos pues, junto con la austriaca Bad Ischl y la noruega Bodø, se va a llenar de eventos para la Capital Europea de la Cultura, que, además coincide con el 800 aniversario de su fundación. Si sois una de esas parejas culturetas os gustará además por su ambiente universitario, por los cafés de novela del barrio de Supilinn, el parque de Toomemägi y el edificio más inclinado de Europa, que rivaliza con la Torre de Pisa.
PARA PAREJAS ECOLÓGICAS: VILNA
Podría ser Valencia, que este año ejerce como Capital Verde Europea, pero si queréis ir más allá, podéis adelantaros y hacer una escapada a Vilna, que lo será en 2025. Pequeña y encantadora, la capital de Lituania ha sido declarada la segunda ciudad más verde de Europa y la tercera del mundo, con más del 60% de su superficie arbolada. Posee un casco antiguo declarado Patrimonio de la Humanidad y un barrio de artistas, Uzupis, que se ha declarado república. Para descubrir en pareja también sus otros puntos fuertes: la catedral basílica, el ambiente universitario de sus calles y bares, el jardín de los Bernardinos, el Museo de la KGB y el castillo de Gediminas, con amplias vistas de la ciudad.