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© Cordon PressEs curioso que la codiciadísima Costa de la Luz, que cada verano atrae las miradas de no pocos viajeros, haya conseguido mantener ese halo de paraíso intacto en el que aún se pueden descubrir calas poco concurridas y pueblitos que han sabido mantener la tradición pesquera y agrícola, como Conil de la Frontera. Catorce kilómetros de arenales y uno de los entornos más naturales de la costa de Cádiz nos aguardan entre Novo Santi Petri y El Palmar de Vejer con un montón de planes para hacer este verano. Estos que os proponemos son un acierto.
© Cordon PressPERDERSE POR EL CASCO Y EL BARRIO DE LOS PESCADORES
Que este tramo costero esconda playas doradas increíbles no quita para ir más allá y conocer el corazón de esta localidad, que luce todos los encantos del pueblo andaluz. Frente a la playa de los Bateles, paralela al largo paseo marítimo, Conil muestra su blanco caserío abierto al Atlántico.
Hay que subir en dirección a la Torre de Guzmán (en la imagen), una fortificación amurallada del siglo XIII desde cuyas almenas se obtiene una bonita panorámica que nos da una idea de lo que nos espera. A sus pies la plaza de Santa Catalina, una de las más bellas y concurridas.
De ahí a la puerta de la villa -la única que queda de la antigua muralla- y pasar por el arco en dirección a la plaza de España para perderse luego por sus calles blancas con viviendas señoriales y terracitas en las que hacer un alto en el camino. Y luego perderse de nuevo en el barrio de los Pescadores -sus calles llevan nombres de distintos pescados-, origen y alma de Conil, con callejuelas estrechas desordenadas, plazoletas y patios repletos de flores que refrescan el camino. Allí hay que curiosear en las tiendas de artesanía, boutiques o sentarse en los bares que sacan sus terrazas a las calles peatonales y disfrutar del ambiente.
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© Cordon PressHACER UNA RUTA POR EL SENDERO DE CASTILNOVO
La torre de Castilnovo, construida en el siglo XVI como torre de vigía y al servicio de las almadrabas, situada junto a la playa del mismo nombre, es el inicio de un bonito sendero botánico (tres kilómetros y medio solo ida) que transcurre paralelo a la playa, repleto de biodiversidad gracias a sus humedales. Plantas aromáticas y distintas especies de aves -como el ibis o el chortilejo- se descubren en una ruta sencilla por esta zona protegida.
© Cordon PressPOR LOS INMENSOS Y ANCHOS ARENALES
La arena fina y dorada de las playas de Conil de la Frontera y la calidad de sus aguas las sitúa entre las mejores de la costa de Cádiz. Los Bateles -la más cercana al pueblo-, La Fontanilla – con más de un kilómetro es una de las más familiares- y la de Roche ondean este verano 2023 la deseada bandera azul gracias a su calidad y servicios.
La playa Fuente del Gallo (en la imagen), aún de un tamaño considerable, es perfecta para un paseo al atardecer cuando la puesta de sol intensifica los colores rojizos de las paredes de los acantilados. Lo mejor es visitarla cuando hay marea baja, porque cuando sube desaparece gran parte bajo el agua.
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© Cordon PressO DESCUBRIR PEQUEÑAS CALAS
Si lo que buscamos es resguardarnos del viento -que en este tramo de costa el Levante puede fastidiar un día de playa- lo mejor es ir en busca de las calas. Al abrigo de los acantilados, entre las mejores están la de Puntalejo, preciosa, pequeña y poco concurrida; la cala del Tío Juan Medina, tiene un buen acceso por lo tanto también más gente; la cala del Frailecillo, la del Enebro o la del Pato y también la cala del Áspero, una de las más desconocidas.
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© Cordon PressALQUILAR UN KAYAK EN LA CALA DEL ACEITE
No nos hemos olvidado de esta cala junto al puerto pesquero de Conil, una de las favoritas de los visitantes al ser accesible y estar resguardada de los vientos y el oleaje. Es el lugar ideal para alquilar un kayak o una tabla de paddle surf (en el verano) o tomarte algo en el chiringuito. En sus aguas transparentes también se puede practicar el snorkel.
© @elhuertoconilEL ATARDECER DESDE UN CHIRINGUITO
No hay verano sin chiringuitos, esos locales especiales a pie de playa donde sentir la arena bajo nuestros pies y comer arropados por el sonido del mar, acompañando con las mejores vistas a un buen plato de arroz, los mejores productos del mar o un cóctel a media tarde. En la playa de La Fontanilla puedes hacerlo en Casa Diego, en El Huerto (restauranteelhuertoconil.com, en la imagen) o en La Ola (laolaconil.com).
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© Getty ImagesPASAR POR LA CHANCA
Esta construcción del siglo XVI que hoy acoge el Centro de Interpretación del Mar, el Atún y las Almadrabas (lachancaconil.es) es uno de esos motivos que no hay que perderse en Conil de la Frontera. No hay mejor lugar para comprender la relación de esta localidad con el mar y la tradicional pesca del atún o con el milenario arte de las almadrabas. La divulgación del respeto a los entornos marinos y a su biodiversidad biológica forman parte del ADN de este centro que organiza visitas guiadas en el verano.
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© Getty ImagesASISTIR A UNA SUBASTA DE PESCADORES
En el puerto pesquero de Conil puedes asistir por la mañana o por la tarde a la subasta de pescado en la lonja, donde se ven los productos de primera calidad traídos del mar. Desde el mirador del faro del cabo de Roche hay una excelente panorámica y por las pasarelas de madera se conoce todo su entorno. También es buena idea reservar para comer en el Club Náutico para un tapeo con vistas al puerto.
© @francisco.fontanillaY LUEGO DEGUSTAR EL MEJOR ATÚN
Uno de los principales e indiscutibles motivos para visitar este tramo de la costa de Cádiz es disfrutar de su mayor tesoro gastronómico: el atún. Aunque la almadraba tiene su particular temporada -se captura entre los meses de abril y junio- el atún rojo es el protagonista absoluto en las cocinas y se degusta todo el año.
En los restaurantes y bares del casco histórico se puede probar esta joya gastronómica -muchos participan en la Ruta del Atún que se celebra en el mes de mayo- y presumen de sus cientos de formas de prepararlo. También en el restaurante Francisco Fontanilla (franciscofontanilla.com, en la imagen) a orillas del Atlántico y donde se come el pescado más fresco o en Cabo Roche (caboroche.es), con varios premios en el concurso anual de atún .
Y para las compras, a 20 minutos de Conil en la localidad de Barbate, está la fábrica de salazones y conservas Herpac (herpac.com). Además de visitas guiadas en su tienda puedes hacer acopio para no echar tanto de menos Conil al regresar a casa.
