Alojamientos rurales de capricho para escaparte a Cantabria

VILLA PACHECA CASA BOUTIQUE

Santiurde de Toranzo 

Cuando Adriana miraba casas para crear Villa Pacheca, buscaba sensaciones de hogar. Siempre le ha gustado la decoración, por eso, desde que empezó a escribir en medios de comunicación, esta periodista de lifestyle adoraba visitar hoteles y restaurantes decorados de manera cálida y tradicional. Ama las antigüedades porque tienen romanticismo, dice que son objetos con alma que alguna vez vivieron en otras casas otras emociones. Todo ello se conjuga en esta casa rural montañesa donde lucen piezas escultóricas junto a suelos de microcemento blanco, lámparas de araña francesa con papeles pintados y arte abstracto. 

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La cuadra de esta antigua vivienda construida con madera de roble, piedra de sillería y gruesos muros de mampostería es ahora un gran salón convertido en el lugar perfecto para disfrutar con la familia y los amigos, porque la casa se alquila completa. Tiene más de 300 metros cuadrados y en sus 5 dormitorios dobles el silencio y el confort de sus camas de alta calidad aseguran el descanso, como relax el jardín exterior. Alrededor, un entorno espectacular para hacer rutas, porque Santiurde de Toranzo queda cerca de Puente Viesgo y el valle del Pas. Desde 400 € la noche en temporada baja (villapacheca.es). 

APARTAMENTOS PICOS DE EUROPA 

Colio

Despertar o ver atardecer en uno de los rincones más bellos, tranquilos y desconocidos de los Picos de Europa, a pocos minutos caminando del parque nacional y con una de las mejores vistas de Peña Ventosa, Peña Sagra y la sierra de Colio, no pasa todos los días. A no ser que se esté alojado en estos apartamentos del valle de Liébana. Un lugar para disfrutar de la naturaleza y del paisaje (apartamentoslospicosdeeuropa.com). 

En medio de un prado de 12.000 metros cuadrados, los apartamentos Picos de Europa son nuevos, amplios, luminosos y han sido construidos con criterios de sostenibilidad. Todos tienen entrada independiente, están decorados en estilo nórdico con un mobiliario muy confortable y no falta en ellos la chimenea, ¡ni el wifi! La mayoría son dúplex, también los hay en una sola planta y todos resultan igual de acogedores. Aunque el verdadero lujo, no hay duda, es el lugar en que se encuentran, porque aquí el coche se aparca y se disfruta de los mil recorridos a pie o en bici que ofrece el entorno. Desde 216 € el fin de semana para dos personas.
 

CABAÑAS CON ENCANTO 

Valles Pasiegos

El paisaje de estos valles, con prados verdísimos salpicados de cabañas que se pierden tras las lomas de las montañas, recuerda al de los Alpes suizos. Los pastores de estas tierras practicaban la muda, una especie de trashumancia en altura que los llevaba a desplazarse de cabaña en cabaña hasta lo más alto en busca de pastos para el ganado. Ahora estas antiguas construcciones tradicionales pasiegas tienen una segunda vida. 

Agustín y Cristina, enamorados de los valles pasiegos, empezaron rehabilitando una de forma artesanal y ya cuentan con una decena de ellas con todo lujo de detalles repartidas por este entorno (cabañasconencanto.com). Las hay desde niditos para dos, a partir de 125 € la noche, a otra para ocho plazas. Aunque aisladas, tienen wifi (y chimenea).  

EL MOLINO TEJADA

Polientes  

El rumor de las aguas del río Ebro pone música de fondo al entorno de este molino de piedra centenario en una finca del valle de Valderredible. Entre sus muros acoge 9 suites exclusivas llenas de encanto equipadas con una cocinita. Un retiro bohemio rodeado de tierras de cultivo para encuentros familiares y con amigos.

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La propiedad de El Molino de Tejada dispone de otros alojamientos en los pueblos de Polientes y Ruerrero, así como otros espacios dedicados a la gastronomía, al talento de los artesanos locales e internacionales y a los retiros creativos, desde poesía a fotografía o bienestar. Habitación doble, a partir de 135 € (molinotejada.com). 

LA CUPLIA 

Pedroso de Villacarriedo

Cinco hectáreas de plantación de arándanos tapizan la ladera del monte de la Cuplia, en el valle pasiego del río Pisueña, donde pastan plácidamente caballos y ovejas carranzanas y se ubica este precioso alojamiento que acoge dos antiguas cabañas independientes de alquiler íntegro. Alrededor de Pedroso de Villacarriedo, un entorno lleno de alicientes naturales, como el hayal de Aloños, el Parque de Cabárceno o las cuevas del Monte Castillo, en Puente Viesgo, Patrimonio de la Unesco. 

Excursiones a menos de una hora de Santander

Montespinos tiene capacidad para alojar a cuatro personas y Fuentelombillo a ocho, y como denominador común: gruesos muros de piedra, techos de madera, salones diáfanos, chimenea abierta, calefacción por suelo radiante y una decoración confortable y exquisita. En la grande hay piscina climatizada, y en la más pequeña, un exclusivo jacuzzi a cubierto (lacuplia.es). Casa pequeña: 320 € (2 noches).

LA INFINITA 

Carmona

En el valle de Cabuérniga, Carmona es un pueblecito encantador, de calles de piedra con casas populares y a otras nobles, rincones encantadores y los vecinos artesanos trabajando la madera a las puertas de sus viviendas. En una de esas casonas-palacio del siglo XVIII de arquitectura montañesa dos amantes de la buena vida sencilla, Lucía y Fernando, decidieron instalar una casa rural boutique donde uno se siente como en casa. 

Valle del Nansa: esencia rural de las cumbres al mar 

La Infinita solo tiene 4 habitaciones, dos dobles con balcón y dos abuhardilladas. También hay rincones de lectura, jardín y, más allá, un molino recuperado también como alojamiento. La historia de este antiguo molino comenzó hace ya mucho tiempo, cuando aquí se molía la harina de maíz para todo el valle que servía para generar la electricidad del pueblo. El recuerdo siempre estará presente en este lugar convertido en los años ochenta en una preciosa casita donde disfrutar de intimidad con familia o amigos.

De alquiler íntegro, el molino puede acoger a a un total de 6 personas en sus dos habitaciones dobles con baño, una con un pequeño balcón y la otra con vistas al río. Cuenta con salón con chimenea, cocina equipada y un jardín privado donde crecen inmensos árboles y pasa un precioso río en el que chapotean las nutrias. Habitación doble: desde 94 € (lainfinita.com/el-molino). 

LA PEÑIGA

Mazcuerra

El propietario de La Peñiga, que hace cuarenta años pasaba los veranos en el pueblo de Mazcuerras, siempre se sintió atraído por esta finca en las laderas montañosas próximas, especialmente por sus árboles, su desnivel y el agua, requisitos necesarios para hacerse con ella y crear en sus 35.000 metros cuadrados un verdadero arboretum, con todo tipo de especies: hayas, robles, secuoyas, cedros, arces, castaños... Ha pasado el tiempo, y después de mucho esfuerzo e ilusión, la finca es ahora un enclave de belleza compartida donde pasar unos días inmersos en la naturaleza. 

En medio de este gran jardín con estanques, una casa de madera de estilo americano, llena de luz, grandes ventanales y un espectacular porche para poder disfrutar las 4 estaciones del año. En sus 300 metros cuadrados hay 4 habitaciones, 3 baños completos, cocina y varios salones para alojar a 8 personas. Techos y suelos de madera, textiles cálidos, estancias decoradas con gusto... Un lujo en la naturaleza (fincalapeniga.com). Dos noches en temporada baja, 1400 €. 

EL MOLINO DE BONACO

San Vicente de la Barquera

Una casa montañesa y un pajar son el origen de este conjunto rural dentro en una gran finca de 30.000 metros cuadrados en plena naturaleza, con prados, bosques autóctonos, un lago, cascada de agua y el molino harinero que da nombre al lugar. Lo encontramos junto al río Escudo, en un pequeño pueblo próximo a San Vicente de la Barquera y al Parque Natural de Oyambre. 

Oyambre, la playa que también es parque natural

Los 8 alojamientos rurales de El Molino de Bonaco, con capacidad para dos o cuatro personas, cuentan con todas las comodidades y una cuidada decoración de estilo rústico, a base de vigas vistas de madera, telas cálidas y una acogedora atmósfera (elmolinodebonaco.com). 

CASA DE LIZ 

Rioseco de Guriezo

En el entorno rural de Guriezo, un valle cántabro a medio camino entre Bilbao y Santander y muy cerca de la costa, se disfruta de la naturaleza de mil maneras: caminando por bonitos senderos, paseando por playas espectaculares, comiendo bien, haciendo deporte al aire libre... Para todo ello están pensados los cuatro apartamentos cuádruples decorados con estilo de Casa de Liz (casadeliz.es). 

Son lofts en los que conviven la estética industrial con la calidez de la madera, luz que penetra por sus estructuras de cristal y hierro, terrazas amplias... Sencillez, elegancia y buen gusto a pocos kilómetros de Castro Urdiales y Santoña.