Maravillas rurales para disfrutar este verano en modo 'slow travel'

LOS PUEBLOS DE LA ALPUJARRA GRANADINA

En Granada descubrimos una de las comarcas más fascinantes de España con pueblos blancos construidos sobre laderas imposibles y barrancos de aguas caudalosas donde se dan la mano naturaleza y patrimonio. El acceso se realiza por el pueblo de Lanjarón, famoso por sus aguas de propiedades mineromedicinales y su reconocido balneario. Poco más allá Órgiva, capital de la comarca y luego Soportújar, donde se encuentra un curioso centro budista de meditación y retiro (oseling.com), además de ser uno de los conjuntos arquitectónicos más característicos con numerosos tinaos –unos pasadizos que se forman bajo las casas–.

En dirección a la montaña el barranco de Poqueira acoge a sus pueblos más conocidos: Pampaneira, Bubión y Capileira donde se aprecia la autenticidad de la arquitectura tradicional alpujarreña. Muchos otros nos quedan por descubrir en función de la prisa y de lo que queramos movernos, lo que aquí supone un ejercicio de subida y bajada constante: Pitres, Pórtugos, Busquístar, esperan siguiendo la carretera. Y Trevélez, el pueblo más alto de España, donde se cura su suntuoso jamón serrano, con denominación geográfica protegida, gracias a los vientos de esta sierra granadina.

PISCINAS NATURALES DEL VALLE DEL JERTE

Muchos visitan el valle del Jerte durante la primavera, cuando los cerezos estallan en flor y se celebra su afamada fiesta. Pero es el verano cuando se disfruta del agua en este valle con abundantes cascadas y piscinas naturales en un entorno de bosques de castaños centenarios. Una de las más fotogénicas es la del Caozo, a la que se accede desde el pueblo de Valdastillas. 9 kilómetros separan Valdastillas de Navaconcejo, al pasar esta localidad en dirección a Cabezuela del Valle encontramos otra de las gargantas en la que hacer parada, la de Las Nogaledas, con varios saltos de agua. Y aún nos quedan las más conocidas de todas, las de Los Pilones, el rincón estrella de la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos (en la imagen), unos encajonamientos de granito que forman pozas de agua y son el objeto de deseo de quienes acuden al Jerte durante el verano.

RUPIT, UN VIAJE AL MEDIEVO EN BARCELONA

Ante la pregunta de cuáles son los pueblos medievales más bonitos de Cataluña, en la respuesta aparece siempre Rupit. Y es que sus calles estrechas y empedradas, sus casonas de piedra y el paisaje natural que lo envuelve le hacen merecedor de estar en esta lista.

Salvar el puente colgante sobre el río y vagar sin prisas entre sus callejuelas escalonadas es como hacer una escapada al Medievo. Merece la pena realizar la ruta sombreada junto al torrente que rodea a la villa siguiendo las paredes naturales, lo que permite contemplar las murallas del antiguo palacio, pasando por la fuente de Carreguell y el puente medieval de Can Badaire.

Puede ser divertido, y un plan muy slow, conocer su entorno alquilando una burricleta –bicicleta eléctrica- en el Hostal Estrella (hostalestrella.com) tienen disponibles. Otra opción es acercarse al pantano de Sau para realizar actividades acuáticas como kayak (kayaksau.com), paddle surf o aquaslider (aquaterraclub.es).

BAÑOS DE INTERIOR EN LAS LAGUNAS DE RUIDERA

Nada menos que 15 preciosas lagunas unidas entre sí por arroyos, cascadas y conductos subterráneos, a medio camino entre Ciudad Real y Albacete, son una escapada perfecta y refrescante para este verano que además están atravesando un momento hídrico excelente. Las lagunas están llenas de agua y es la ocasión perfecta para darse un baño o practicar alguna actividad acuática. Hay zonas de baño habilitadas en las lagunas del Rey, Colgada, Santos Morcillo, Salvadora, Redondilla y San Pedro.

La visita da para muchas otras actividades como un bautismo de buceo –algunas lagunas superan los 20 metros de profundidad–, snorkel, una travesía en kayak o paddle surf que pueden hacerse con empresas como Ruidera Activa (ruideractiva.com). También para pasear por sus orillas observando las aves que pueblan este humedal: ánades, fochas, porrones, somormujos, zampullines y el aguilucho lagunero, o para realizar una visita guiada en 4x4 (lagunasderuidera.es) en la que descubrir las maravillas de este parque de la mano de un guía experto.

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SIERRA DE GRAZALEMA, PUEBLOS BLANCOS EN UN PARQUE NATURAL

Si pensamos en Grazaleza lo hacemos en una sierra, pero también es un pueblo y un parque natural que se extiende entre el noreste de Cádiz y el noroeste de Málaga, y en el que se refugian en el verano aquellos que huyen del calor de las ciudades y de la masificación de las playas de Andalucía. Además, los meses de julio y agosto se celebran las fiestas mayores de muchos de los pueblos que jalonan esta sierra, un aliciente más.

Entre sus imprescindibles, Zahara de la Sierra, uno de los pueblos más bellos de España, con casas sobre la montaña dominando las aguas turquesas del embalse de El Gastor. Y Grazalema, un caserío blanco apiñado a los pies del cerro de San Cristóbal con una encantadora plaza Mayor. Ubrique es conocido por sus trabajos en piel y cuero, y Olvera por estar coronado por una fortaleza y por haber sido elegido Capital del Turismo Rural en 2021. Otros muchos van salpicando esta sierra gaditana, en los que hacer parada según apetezca antes de atravesar el Parque Natural de los Alcornocales y alcanzar las azules aguas del Atlántico.

EL CONGOST, UNA JOYA NATURAL ENTRE HUESCA Y LLEIDA

Paredes de medio kilómetro de altura y separadas no más de 20 metros en alguno de sus tramos es el espectáculo natural que ofrece el congost de Montrebei, uno de los cañones más estremecedores de España que el curso del Noguera Ribagorzana ha abierto en el macizo del Montsec, frontera natural entre Huesca y Lleida. Un sendero bien señalizado, y excavado en la roca en la pared oriental, permite recorrer los kilómetros más angostos y vertiginosos del desfiladero. Los más atrevidos podrán atravesar las Pasarelas de Montfalcó (pasarelasdemontfalco.com) ancladas a la roca en los cortados de la orilla occidental. La panorámica es impresionante.

Otra opción posible para recorrer este entorno, y tener otra perspectiva, es descendiendo al río para navegar en kayak por sus aguas. Hay varias empresas de turismo activo que los alquilan como Civitatis (civitatis.com), Zenith Aventura (zenithaventura.com) o Kayaking Montbebei (kmr.es).

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PUEBLOS Y CASCADAS MÁS ALLÁ DE LA COSTA BLANCA

El verano en Alicante pasa por localidades tan conocidas como Altea, Calpe, Benidorm y las playas de la Costa Blanca. Pero es en su interior donde se esconden pueblos históricos, preciosos paisajes naturales, cascadas y pozas tan apetecibles o más que sus playas.

Es el Castell del Guadalest uno de los pueblos más cautivadores de la provincia. Encaramado en una peña se accede a él por una puerta horadada en la roca. Sus calles medievales, sus muchos museos –es el pueblo con mayor número de museos por habitante de toda España–, y el castillo, desde donde se obtienen unas vistas inmejorables, son las visitas más recomendables. En el embalse a sus pies se pueden realizar actividades como kayak o un paseo en un barco solar. Bajando desde Guadalest en dirección a la costa llegamos a las Las Fuentes del Algar (lasfuentesdelalgar.com) un paraíso de cascadas y pozas cristalinas donde refrescarse sin necesidad de llegar a la playa.

SIURANA, ESCAPADA SLOW POR EL PRIORAT

Otra de esas bonitas villas para descubrir en una escapada nos lleva hasta los encantadores pueblos del Priorat, en Tarragona. Y de entre ellos Siurana, asentado sobre un risco desde el que las vistas cortan el aliento. Calles empedradas que parecen un decorado de una serie sobre el medievo, casonas de piedra adornadas con flores de vivos colores y un mirador, el Salto de la Reina Mora, donde respirar profundo y detenerse a contemplar el paisaje. No hay otra panorámica igual.

En el entorno el pantano de Siurana, de aguas tranquilas donde en verano se practican deportes acuáticos y está permitido el baño en alguna de sus playas. También podemos simplemente pasear, el paisaje lo merece.

CAZORLA, CAPITAL DEL TURISMO RURAL 2022

La última distinción recibida por la localidad de Cazorla la hace ostentar la capitalidad del turismo rural de España este año, el destino favorito de los viajeros españoles que la eligieron por votación. Una razón más (como si hiciera falta) para acercarse a este pueblo jienense que da nombre a la sierra más famosa de la provincia. Lo primero que llama la atención son sus casas encaramadas a la montaña y coronadas por un castillo, hoy reconvertido en museo. Junto a esta visita conviene pasar por la plaza de Santa María, pasear por su barrio antiguo y asomarse al balcón de la Zabaleta. Pero a Cazorla se viene especialmente a disfrutar de su entorno, el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. Senderos, cascadas, cerradas donde transitar por pasarelas y mucha naturaleza en el espacio protegido más grande de España.

UN PUEBLO EN MEDIO DE UNA CASCADA

Para una escapada slow y refrescante nos vamos a Orbaneja del Castillo, uno de los pueblos más bonitos de Burgos y de España, que ofrece el marco perfecto con apenas medio centenar de habitantes y donde el día trascurre al ritmo del rumor del agua en un espectacular meandro del río Ebro. Una vez allí asombra su cascada que parece salir de las propias casas y cae en escalera partiendo en dos la localidad. En realidad sus aguas brotan en la Cueva del Agua, una caverna que se abre en la roca más arriba. Poco después de la cascada las aguas forman unas pozas cristalinas, las de La Turquesa, que pueden recorrerse, aunque el baño no está permitido para proteger este singular entorno. Sí podemos sentarnos en alguno de los restaurantes de la localidad que en época estival y fines de semana se llenan de turistas deseosos de conocer los encantos de Orbaneja.