,type=downsize)
© ShutterstockBOSQUE DE BAMBÚ DE ARASHIYAMA, KIOTO
En el barrio de Arashiyama, al pie de las montañas y bañado por el río Hozu, descubrimos el santuario vegetal más bello y místico de Japón. Sumergirse en este encantador bosque de bambú, cuyos tallos se mecen al son del viento mientras la luz se cuela por su espesura es tan fascinante como disfrutar de su sonido, que, aunque la mayoría de extranjeros no lo saben, es lo que más aprecian los japoneses. Tanto es así que es uno de los paisajes sonoros oficiales de Japón. Para disfrutar de tanta belleza y hacerse la foto en solitario, no queda más remedio que madrugar.
No te lo pierdas: Los diez lugares que no te puedes perder en tu primer viaje a Japón
© ShutterstockMONTAÑAS ARCOIRIS DE VINICUNCA, PERÚ
Perdido en un pliegue de los Andes, a más de 5000 metros de altitud, se oculta el capricho de la naturaleza de Vinicunca, una cumbre que, gracias a los minerales que guarda en sus entrañas, aparece pintada de vibrantes colores. Escondida durante siglos bajo un glaciar, es la última maravilla del país del Machu Picchu. Después de descubrirla en Instagram, son muchos más los que se apuntan a la excursión desde Cuzco que lleva hasta ella.
No te lo pierdas: ¿Dormirías suspendido a 400 metros de altura en el Valle de los Incas?
© ShutterstockRÍO CELESTE, COSTA RICA
Entre el catálogo infinito de maravillas naturales de Costa Rica que llenan Instragram, el río Celeste atrae como un imán por su color. Es la unión de dos ríos con contenidos minerales distintos provenientes de las faldas del volcán Tenorio, lo que otorga a sus aguas ese tono tan particular que le da nombre. Más mágica es la leyenda que dice que cuando Dios terminó de pintar el cielo limpió los pinceles en el río Celeste. La historia cobra sentido al adentrarse en el Parque Nacional Volcán Tenorio –con aguas termales, hervideros y fumarolas– y descubrir el color de la laguna que se forma bajo su cascada en medio de la selva.
No te lo pierdas: Cascadas increíbles en la naturaleza de Costa Rica
© ShutterstockCALLEJA DE LAS FLORES, CÓRDOBA
Muy cerquita de la Mezquita-Catedral queda esta calleja que se ha convertido en un icono de la ciudad, una postal típica que se va buscando para fotografiar. La torre campanario que trazara Hernán Ruiz aparece desde esta atrapada entre los tejados de las encaladas casas del casco antiguo. Una perspectiva a la que ponen color y frescor, el sinfín de macetas que cuelgan de sus paredes. También para presumir en las redes, la instantánea puede tomarse en la pequeña plaza que se encuentra al fondo de la calle, decorada con una coqueta fuente.
No te lo pierdas: Dos días en Córdoba con un montón de ideas para vivir su esencia
© ShutterstockLAS CÚPULAS DE OIA, GRECIA
Al borde casi del acantilado, Oia, en la isla de Santorini, es un pueblo de postal. Uno de los más bellos del Mediterráneo entero, con sus casitas blancas, sus iglesias con cúpulas azules, sus coquetos restaurantes al borde del mar y sus despampanantes puestas de sol. Cuando vemos todas esas imágenes de esta joya de las islas Cíclicas en las redes sociales solo nos dan ganas de decir: yo quiero estar ahí.
No te lo pierdas: Mykonos, Santorini y Folegandros, tres islas griegas en blanco y azul
© ShutterstockCLOUD FOREST, SINGAPUR
En Singapur, un buen destino para iniciarse en Asia , uno de los pasatiempos favoritos de locales y turistas es fotografiar todo lo que pasa ante sus ojos. Una buena parte de las instantáneas las acapara el complejo Marina Bay Sands, tres rascacielos unidos en su techo con piscinas infinitas y bares fashion, pero tiene sus rivales en las redes sociales. Los Jardines de la Bahía, el mayor parque de Singapur y otro de los símbolos de la ciudad se extienden a lo largo de 101 hectáreas y a sus icónicos superárboles de entre 25 y 50 metros de altura, añade la sorpresa que encierra en sus invernaderos, Cloud Forest, la catarata de interior más alta del mundo.
© ShutterstockSHAMBLES STREET, YORK
En York los instagramers se vuelven locos, no solo porque es una de las ciudades más hermosas del Reino Unido, también porque en ella, además de muchos rincones con encanto, se encuentra la que ha sido elegida en alguna ocasión la calle más pintoresca de Gran Bretaña. Antigua es, porque ya se la menciona en un censo de 1086 que mandó escribir Guillermo el Conquistador. De las carnicerías que en ella se reunían toma su nombre, hoy sustituidos por coquetas tiendas en los irregulares edificios con entramados de madera de los siglos XIV y XV que se abren a ella.
No te lo pierdas: Yorkshire, en 10 imprescindibles, un condado inglés muy sorprendente
© ShutterstockEUCALIPTOS ARCOIRIS, KAUAI, HAWAII
El arboreto Keahua Arboretum es un lugar muy frecuentado por las familias de la isla de Kauai para ir de pícnic, hacer senderismo, dar paseos en bicicleta de montaña, refrescarse en su arroyo, incluso recorrer un tramo del Kuilau Ridge Trail. Una caminata fácil por este espacio lleva hasta su bosque de eucaliptos multicolor. Una singular especie arbórea que, en determinados momentos del año, pierde su corteza exterior dejando a la vista otra interior de color verde brillante que luego se oscurece y adquiere tonos azules, púrpura, naranjas o granates. Además de en Hawaii, gracias a Instragam, también hemos descubierto estos fotogénicos Eucalyptus deglupta en plantaciones de madera para pulpa de Filipinas, utilizada en la fabricación de papel, o en Costa Rica, como árbol de sombra en los cafetales.
© ShutterstockRUE CRÉMIEUX, PARÍS
Los instagramers que pasan por París han encontrado en esta pintoresca y pequeña calle peatonal del barrio de Quize-Vingts un fondo perfecto para sus posados. ¿Y qué tiene de singular? Pues el colorido de las fachadas de las casas de dos plantas que abren sus puertas a ella. Parejas de novios, jóvenes haciendo acrobacias, sesiones de moda… todo vale en la calle más fotografiada de la capital francesa .
© ShutterstockBOSQUE DE HALLERBOS, BÉLGICA
A media hora de Bruselas, este bosque de hayas se convierte cada primavera en un mágico escenario de cuento cuando su suelo se cubre de miles de jacintos de color púrpura, el mayor número del mundo. El fenómeno dura apenas tres semanas, en torno a la segunda mitad de abril y principios de mayo, pero resulta espectacular por el colorido de la flor que tapiza sus caminos, pues gracias a un sustrato de la tierra, le da esos tonos tan singulares que van del azul pálido al violeta intenso. Para las aspiraciones artísticas de los usuarios de Instagram no tiene precio.
