LA VISTA DESDE EL PUENTE DE VILANOVA
Tiene casi 2 kilómetros de longitud y une la isla de Arousa con Vilanova de Arousa. Desde él se observa la pintoresca estampa de las dornas en la playa de O Vao, esas barcas típicas de pesca pintadas de rojo encendido –la Escuela de Navegación Tradicional Dorna (acddorna.org) organiza cursos para su manejo– y a los deportistas practicando kitesurf a un lado y a otro, según sople el viento (kitesurfgalicia.es). Muy cerca del puente, en el pazo O Cuadrante de Vilanova está la casa-museo de Valle Inclán (museocuadrante.com).
PASEOS EN KAYAK
De punta Quilma se emprenden los paseos en kayak, cada uno rumbo a donde desee, ya que al estar en medio de una ría no se precisan monitores. El destino estrella es el islote de Areoso, a 1,1 kilómetros, que conserva dólmenes megalíticos. No hay más que verlo para certificar un Caribe de copiosa arena y aguas de tonalidad turquesa en las que se sumergen aquellos a quienes le gusta practicar buceo con tubo.
TOURS NÁUTICOS
También se puede dar la vuelta a la isla en una hora, apuntarse a una ruta con mariscadores para ver cómo faenan en las bateas o combinar la salida al islote rocoso y farero de Rúa con el playero de Areoso, como las que organiza Amare (amareturismonautico.com).
PADDLE SURF EN LA PUNTA SUR
Desde la estilizada playa de Xastelas, ideal para un póster, una buena sugerencia es circunnavegar en paddle surf o kayak –en dos horas o demorándose todo el día– la punta sur de la isla (piraguilla.com). Un primor de caletas, arboladas algunas, de aguas calmas todas, integradas en el Parque Natural de Carreirón, perteneciente a su vez a la zona especial de protección del complejo Ons-O Grove.
EN BICI POR EL LITORAL
Como toda isla, la de la Arousa es un lugar para relajarse, con un paisajismo de planicie y calas suaves, cuya arena blanca nada tiene que envidiar a la que embellece las islas Cíes. De sus 36 kilómetros de costa, 11 son de playa y los podemos atisbar a lo largo del carril bici.
SENDERISMO POR CARREIRÓN
Quien opte por el senderismo por Carreirón puede dejar el coche en el aparcamiento de Xastelas y realizar un recorrido circular por el litoral –3,8 kilómetros– entre marismas, pinares de repoblación, sotobosque y cordones dunares. Del lado de la ensenada Brava se erige el molino de mareas, y, en la punta Revello, un observatorio ornitológico, desde donde se contempla una variedad de aves migratorias.
Desde este punto se atisban diseminados aquí y allá cons (piedras graníticas) con formas que simulan personas o animales y se prestan a la imaginación, como el de As Salinas, donde podemos fotografiar un curioso cocodrilo. Forma parte de la ruta de 7 kilómetros que enlaza los cons más llamativos de la isla.
PLAYAS, MIRADORES Y FAROS
En el varadoiro (puerto) de Xufre, los barcos bateeiros atraen por sus cestas para recoger bivalvos. Y pasado el centro urbano aparecen las playas del norte, como la de Area do Secada, 400 metros en forma de concha con el agua más cristalina de la isla frente a un mar de bateas y donde ondea la bandera azul.
No hay que perderse, a la hora del crepúsculo, la panorámica de la ría desde el mirador Con do Forno, que se yergue 80 metros sobre el mar. Ni la de la isla arosana desde el monte Lobeira, a cuya cruz que lo corona se llega después de ascender 216 escalones de piedra. Tampoco el faro de Punta Cabalo, donde se ven delfines y pervive una colonia de caballitos de mar que da nombre al paraje.
ARROZ DE MARISCO CON ALGAS
Para rematar, nada como disfrutar de un sabroso arroz de marisco con algas en el faro Punta Cabalo, una construcción de 1853 que acoge un bar-restaurante en lo que era la vivienda del farero.
Y SI QUIERES MÁS ALLÁ
También imprescindible el recorrido por el casco antiguo de Cambados, capital del vino Albariño, especialmente la plaza de Fefiñáns, con un pazo monumental y la bodega más antigua de la Denominación de Origen Rías Baixas. Pero, además, las ruinas de la iglesia de Santa Mariña Dozo –incluidas en la red de cementerios singulares de Europa–, el Museo del Vino, la torre de San Sadurniño al atardecer y las visitas guiadas por mariscadoras que dan a conocer la cultura marinera (guimatur.org).
GUÍA PRÁCTICA
Dónde dormir
A 10 minutos de A Illa de Arousa, en el Parador de Cambados (parador.es) el alojamiento de calidad más cercano, que ocupa el pazo de Bazán, propiedad de la bisabuela de la escritora Emilia Pardo Bazán. Cuenta con un atractivo patio interior, jardines y piscina de temporada.
A 24 kilómetros, en Meaño y con mucho encanto, Quinta de San Amaro (quintadesanamaro.com), con estupendas vistas y mejor restaurante, sin contar su hórreo acristalado.
En Vilagarcía de Arousa, en Carril (hotelcarril.com), un cuatro estrellas dotado con piscina de agua salada, restaurante y habitaciones con vistas al mar.
Dónde comer
Caldeiradas de órdago y arroz de marisco en A Meca (tel. 986 55 15 51), en la isla de Arousa, que rinde homenaje a la centolla de la ría.
Un lugar con mucha historia es el Bar Saratoga (tel. 986 55 11 06), donde disfrutar del sabor único del pulpo.
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