Castillo de Karlštejn
Situado a 32 kilómetros de la capital checa, en el pueblo de Karlštejn, está este imponente castillo, de estilo gótico y añadidos renacentistas, construido a mediados del siglo XIV por el emperador Carlos IV. Para llegar a él hay que dar un agradable paseo colina arriba en una ruta desde la que se vislumbra su torre de 60 metros, su fortaleza y sus opulentas instalaciones.
La capilla de Santa Cruz, decorada con piedras semipreciosas y pinturas de tabla, acoge las joyas de coronación checas y es el lugar más espectacular de esta fortificación.