Al volante por la carretera más bella de la Toscana
La Strada Regionale 222, la bonita tira de asfalto conocida como la Chiantigiana, que discurre entre Florencia y Siena por los viñedos de los que nace el vino más famoso de Italia, es un destino en sí mismo. Sus apenas 80 kilómetros dan para emborrachar la vista con las colinas tapizadas de cereal, olivos y viñas, los caserones de piedra color miel y las hileras de cipreses que enmarcan la postal más icónica de la campiña toscana.