Como cada año, la consultora "Mercer" ha creado un ranking que recoge las mejores ciudades del mundo para vivir. Entre los datos que se estudian a la hora de seleccionarlas están el entorno social, cultural, médico y medioambiental, datos que repercuten también en el turismo y que las convierten en destinos perfectos para una escapada. Seleccionamos las cinco ciudades europeas que ocupan los puestos más altos de la lista, y os contamos sus principales atractivos.
1. VIENA
La capital de Austria ha sido coronada, por décimo año consecutivo, como la mejor ciudad del mundo para vivir. Capital imperial de la música clásica, Viena es una ciudad limpia, segura y con una amplia oferta cultural. Numerosos y prestigiosos museos, impresionantes monumentos y, para los más golosos, algunos de los mejores dulces europeos, como la tarta Sacher, es lo que encontrarás en tu viaje.
Entre sus imprescindibles: el Palacio Imperial de Hofburg, el más grande y antiguo de la ciudad que alberga en su interior el Museo de la emperatriz Sissi, la catedral de San Esteban, coronada por una torre con forma de agua de 137 metros de altura y un tejado formado por más de 250.000 azulejos, o el Palacio de Schönbrunn, construido en el siglo XVII y conocido como el Versalles vienés.