Aunque algunos aseguran que este remoto archipiélago de la costa dálmata atesora tantas islas y peñascos como días tiene el año, las cifras oficiales lo dejan en alrededor de 150, de los cuales más de la mitad quedan protegidos dentro de un parque nacional prácticamente deshabitado. Si eres amante de la náutica y de la naturaleza sin trillar no puede haber mejor destino, porque solo se puede explorar en barco o, para los más atrevidos, en kayak.