EL ESPECTÁCULO DE LAS BALLENAS JOROBADAS
La península de Samaná, en el extremo noroeste de la isla, es un punto y aparte en República Dominicana. Por sus arenales caribeños sembrados de cocoteros, sus plantaciones, su sabor local, sus colinas montañosas y también por el espectáculo de, de enero a marzo, acoge en las aguas de su bahía. Un santuario para las entre 3.000 y 5.000 ballenas jorobadas que se aparean y reproducen aquí. Observarlas juguetear durante un paseo en bote o verlas desde el observatorio de Punta Balandra es algo único.