Playas azul Formentera, la esencia del Mediterráneo más puro

SES ILLETES

La playa más famosa de Formentera, la más próxima al puerto de La Savina, es un arenal de ensueño que imanta por el híbrido de azules y verdes malaquita de sus aguas, su arena de grano finísimo, la ausencia de oleaje, los pequeños islotes que, frente a ella, le dan nombre. Pero también, por su entorno, el del parque natural de Las Salinas de Ibiza y Formentera, en el que se encuentra. Una vez aquí no hay que dejar caminar hasta la punta de esta flecha de arena, donde Julio Medem rodó algunas escenas de su película Lucía y el sexo, e incluso sentarse a tomar una caldereta de langosta en los chiringuitos cercanos a la playa y acabar contemplando uno de esos atardeceres de postín que brinda el arenal / ©  Turismo de Formentera

LEVANTE

Así se conoce a la playa que ocupa toda la cara este del arenal de Illetes y con la que se une a medida que se avanza hacia el norte. Como esta su arena es blanca y fina, pero con pequeñas superficies rocosas. Y no hay más, bueno, unos pocos chiringuitos. Lo que se dice, una playa en estado natural. Para acceder a ella en coche o moto es necesario abonar una pequeña tasa por aparcar / ©  Turismo de Formentera

MIGJORN

La de Migjorn es la playa más larga de Fomentera, un arenal enorme para una isla pequeña, porque ocupa gran parte del sur. El viento, que también viene del sur, le da nombre. Por eso, cuando este sopla del norte, es la que buscan los que quieren disfrutar del mar en calma. Ya sea tumbado en su arena blanca mirando ese mar de un azul intenso, caminando por la pasarela de madera que la recorre o desde el impresionante mirador que se encuentra en la subida a La Mola, es una playa de 10, aunque no tenga la fama de Ses Illetes / ©  Turismo de Formentera

CALA SAONA

En la costa oeste de la isla se localiza esta pequeña bahía natural de gran belleza paisajística y transparentes aguas que gusta especialmente a las familias por sus aguas claras y poco profundas. La enmarcan pequeños acantilados y varaderos que cobijan las pequeñas embarcaciones de pesca / ©  shutterstock

ES PUJOLS

El núcleo más turístico de Formentera, donde se concentran todos los servicios y se concentra el ambiente, también tiene una bonita playa de arena en forma de concha salpicada por diminutos islotes de fondo, pequeños tramos de roca e innumerables casetas varadero que le otorgan un toque pintoresco. Caminando hacia el oeste, en dirección a la playa de Levante, están las de Ses Canyes y de San Roqueta, para los que busquen aislarse del bullicio estival / ©  shutterstock

Y EN LA COSTA DE TRAMUNTANA

La pequeña playa de Ses Platgetes (en la imagen), dos pequeñas calas contiguas en las que se alterna la arena con superficies rocosas, a dos minutos a pie desde Es Caló de Sant Agustín; y, en el extremo más occidental y accesible desde la población de Sant Ferran, Cala en Baster son las playas de la Costa Tramontana, la parte norte central de la isla / ©  shutterstock

S’ALGA
Así se llama la playa más conocida de S’Espalmador, la isla privada pero de disfrute público que se encuentra frente a Ses Illetes y es la continuación natural de la península de Es Trucadors. Para acceder a este pequeño paraíso hay que tomar un barco desde el puerto de la Savina, contratar una excursión náutica o alquilar una embarcación / © shutterstock

CALÓ DES MORT

Esta pequeña cala es la continuación de Migjorn, separada del área de Es Copinar por una zona rocosa y escarpada. Su belleza reside en sus casetas varadero y en la pared de la montaña de roca caliza que la protege, donde el azote del viento y el mar han creado sinuosas siluetas y pequeñas cuevas / ©  Turismo de Formentera