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EL ORIGINAL: CASTILLO DE NEUSCHWANSTEIN

En un idílico paisaje de los Alpes bávaros y colgado de un risco, el castillo alemán de Neuschwanstein, con sus torreones y su aire de cuento, es el más onírico y extravagante de los que mandara construir Luis II de Baviera, el rey loco. Una fantasía medieval ideada por el propio monarca, quien plasmó en él su visión romántica y lunática del mundo, amén de su amor por las óperas de Wagner, que inspiran en gran medida su decoración onírica.

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LA COPIA: EL NEUSCHWANSTEIN DE CHINA

En el noroeste de China, frente a la bahía Xinghai y el mar Amarillo, los chinos han levantado a imagen y semejanza del castillo de Neuschwanstein The Castle Hotel, un cinco estrellas de lujo que se encuentra sobre la montaña Lotus y forma parte de la marca de hoteles Luxury Collection, operado por Starwood Hotels. Si bien es cierto que cuenta con un restaurante cantonés, su especialidad son las cervezas alemanas artesanas y los platos del norte de Europa de su otro restaurante, mientras su spa Kaiser es lo más parecido a las termas de Baden-Baden.

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EL ORIGINAL: COLISEO

Su nombre verdadero es el anfiteatro Flavio, pero todos le conocen como el Coliseo, la obra más representativa de la Roma clásica e icono indiscutible de esta ciudad vibrante y descarada que se adorna en cada una de sus esquinas de la grandeza del Imperio vastísimo desde el que contagió su cultura a Occidente. 

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LA COPIA: EL COLISEO DE MACAO

Macao es Las Vegas de China. Y se descubre, sobre todo, cuando se accede a Fisherman’s Wharf, un megacomplejo frente al mar con hoteles, restaurantes, bulevares comerciales, casinos y una réplica del Coliseo romano. La copia asiática cuenta con 2.000 asientos y acoge eventos culturales y de ocio.

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EL ORIGINAL: CHÂTEAU DE MAISON-LAFFITTE 

Entre París y Versalles, este castillo que es una obra maestra de la arquitectura barroca francesa del siglo XVII. Un diseño del genial arquitecto François Mansart, que se alza sobre una colina en una de las curvas del río Sena. / © shutterstock

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LA COPIA: EL CHÂTEAU DE PEKÍN

Cuatro siglos después de que se levantara el original en las cercanías de París, un multimillonario chino quiso tener su propia réplica del château de Maisons-Laffitte a las afueras de Pekín y así se lo hizo construir.  Un clon del francés convertido en hotel, en el que no sabemos si algún rey tiene una habitación reservada.

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EL ORIGINAL: ISLA DE PASCUA

Rapa Nui (ombligo del mundo), como la llamaban sus antiguos habitantes, es la isla habitada más remota del planeta, a casi cuatro mil kilómetros de la costa. No hay otra porción de tierra en el mundo tan aislada en el mar, por eso su aura de fascinante misterio. Los moais, esas gigantes esculturas que impasibles contemplan el Pacífico desde hace miles de años, son la máxima expresión de esta cultura.

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LA COPIA: MOAIS DE BEINJING

La copia de la Isla de Pascua en China está en el distrito financiero de Beinjing, se trata de 12 gigantescas esculturas de moais que se suceden a lo largo de un paseo peatonal. Eso sí, es solo una pequeña muestra, porque las originales son ¡887 figuras!

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EL ORIGINAL: TORRE EIFFEL

Es el gran símbolo de París y eso que nació con controversia cuando fue construida en 1889 para la Exposición Universal y a punto estuvo de ser destruida en varias ocasiones. Gracias que no lo fue, porque ahí está el monumento más visitado del mundo. Subir a sus 300 metros de altura es una experiencia única que nadie quiere perderse en la capital del Sena.

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LA COPIA: LA TORRE DE TIANDUCHENG

A los chinos les encanta París y prueba de ello es su afán por tener un pedacito de la Ciudad de la Luz más a mano. No es la única en el país, pero la ciudad de Tianducheng tiene su propia Torre Eiffel, aunque más mini, porque tiene algo más de 100 metros de alto, en vez de los 314 de la original. La torre forma parte de una réplica en miniatura de la capital parisina, donde no faltan los Campos Elíseos ni sus plazas y parques diseñados a la francesa.

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EL ORIGINAL: TOWER BRIDGE 

Es uno de los iconos de la capital británica. Y como tal, este puente levadizo de estilo victoriano situado junto a la Torre de Londres y que une las dos orillas del Támesis, es blanco obligado de cualquier selfie durante una escapada a la ciudad. Su interior es visitable.

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LA COPIA: EL PUENTE DE SUZHOU

Ese afán por las imitaciones del gigante asiático ha llevado incluso a algunas ciudades chinas a la especialización. La de Suzhou lo es en copiar puentes de todo el mundo. Y claro, no podía faltar la réplica del Tower Bridge de Londres. Una copia que duplica en tamaño al inglés y que cuenta con cuatro torres en lugar de dos.

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EL ORIGINAL: CANALES DE VENECIA

Venecia es la ciudad de los canales por excelencia. Un laberinto de agua donde se suceden sin tregua palazzos, iglesias y plazas de una monumentalidad que sobrecoge.

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LA COPIA: CANALES DE SUZHOU

En la Venecia de Suzhou hay canales y puentes que los cruzan, si no no sería Venecia, y también jardines maravillosos a su alrededor. A tiempos imperiales traslada esta ciudad china próxima a Shangai que ha merecido su declaración como Patrimonio de la Humanidad.

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