1/16

La capital austriaca vive un año frenético. Y no es para menos. Hace cien años murieron cuatro de los protagonistas de la Viena modernista: los pintores Gustav Klimt y Egon Schiele, el arquitecto Otto Wagner y el inclasificable Koloman Moser. Como si se hubieran puesto de acuerdo, la ciudad celebra el aniversario con numerosas exposiciones y actos conmemorativos bajo el título de la Viena de 1900. Una excusa perfecta para escaparse a ella y disfrutar de arte, pero también de un montón de experiencias para todos los sentidos.

2/16

FRENTE A FRENTE CON GUSTAV KLIMT

Más allá de descubrir El Beso, en el palacio Belvedere, Viena 1900 descubre para la ocasión a Klimt en otros escenarios. En el Museo de Historia del Arte de la capital austriaca se ha erigido el puente de Klimt, un andamio instalado a 12 metros de altura entre columnas y arcadas que permite acercar a los ojos las 13 obras tempranas del artista que decoran su escalinata. Junto a este, una gran pintura a gran escala, la llamada Nuda Veritas. La novedad en el Museo Austriaco de Artes Aplicadas (MAK) es El Jardín Mágico de Klimt, un experimento de realidad virtual inspirado en sus obras maestras donde sumergirse en un viaje cinematográfico interactivo /  © KHM - Museumsverband

3/16

UNA EXPOSICIÓN IRREPETIBLE

En el Belvedere Inferior, en el MAK, en el Wien Museum, en el Museo de Historia del Arte, en el Judío, en el del Mueble… Son muchos los lugares que forman parte de la gran exposición organizada para este aniversario que rinde homeneaje a los principales representantes del Modernismo vienés. Y también el Leopold, donde se puede ver una gran muestra dedicada a Egon Schiele, con más de 250 obras del artista.

4/16 ©

CUATRO PLANES GASTRO MUY ALTERNATIVOS

Probar una típica salchicha asada en el quiosco Bitzinger de Albertinaplatz, detrás de la Ópera; los legendarios canapés del restaurante Kameel (kameel.at), cenar el tradicional gouslah en Glacis Beisl (glacisbeisl.at), y rematar con un cóctel en el Loos American Bar (loosbar.at), diseñado por el afamado arquitecto Adolf Loos / © WienTourismus - Peter Rigaud

5/16 ©

PERDERSE POR EL BARRIO DE SPITTELBERG

Spittelberg, el distrito 7 de la ciudad, es uno de los barrios de moda de Viena, en cuyas pintorescas callejuelas, sobre todo Spittelberggasse y Gutenberggasse, donde se levantan casas de estilo Biedermeier abren galerías de arte, talleres de jóvenes diseñadores, modernos restaurantes, tiendas vanguardistas y pubs. En él no te pierdas histórico patio de Amerlinghaus con sus típicas galerías Pawlatschen, y el Museumsquartier, sin duda, el complejo cultural más destacado de Neubau, donde los antiguos establos imperiales albergan varios museos de arte de los siglos XIX al XXI / © WienTourismus - Christian Stemper

6/16 © Getty Images

CHOCOLATERÍAS PARA CHUPARSE LOS DEDOS

Dos chocolaterías de lo más tentadoras son Leschanz (leschanz.at), ubicada en una antigua mercería, donde probar sus ‘botones’ de chocolate, y Altmann & Küehne (altmann-kuehne.at), famosa por sus bombones y chocolates en miniatura. Otras pastelerías clásicas son Demel (demel.com), en la imagen, Sluka (sluka.at) y Oberlaa (oberlaa-wien.at).

7/16

DIRIGIR A LA FILARMÓNICA DE VIENA

El sueño de cualquier melómano es dirigir la mejor orquesta del mundo y puede hacerse realidad en la Haus der Musik (hausdermusik.com), un moderno museo instalado en la que fue casa de Otto Nicolai, el fundador de la Filarmónica de Viena. La Filarmónica es virtual, claro, no de carne y hueso, pero sus miembros siguen fielmente el ritmo que se les marca con la batuta. Es una de las experiencias que regala este interactivo museo del sonido en sus diferentes espacios multimedia. Ideal para disfrutar en familia.

8/16 ©

IR DE COMPRAS POR EL BARRIO DE ORO

Viena también tiene su barrio de oro para las compras. Con forma de ‘U’, lo dibujan las callejuelas que llevan desde el palacio imperial Hofburg, pasando por el Kohlmarkt, hasta las peatonales calles Graben y Kärntner. Aquí donde antaño estaban los negocios que abastecían a la corte imperial, hoy están las marcas de lujo de Cartier, Chopard, Wellendorff, Tiffany... / © WienTourismus - Peter Rigaud

9/16

TOMAR UNA TARTA KLIMT FRENTE A LA ÓPERA

El número 51 de la calle Kärntner Straße es una dirección para paladares refinados y sibaritas. Y es que aquí se encuentra el palacio Toscano, que, desde 1847, acoge la confitería imperial Gerstner (gerstner-konditorei.at). Sentarte en el salón de su primer piso y saborear un café con una tarta Klimt mientras desde la ventana se admira el edificio de la Ópera no tiene precio. Bueno, solo 9 €. En la planta baja está la tienda, donde dejarse tentar por sus pasteles, cupcakes, petit fours…, mientras que el segundo piso lo ocupa un café restaurante en el que probar exquisiteces dulces y también de la cocina vienesa.

10/16

DORMIR EN UN HOTEL DE DISEÑO

Para una escapada de fin de semana muy artística nada mejor que un hotel con arte. Y Topazz (hoteltopazz.com) lo es, además de céntrico, a 200 metros de la catedral. Un alojamiento inspirado en la obra del influyente artista austriaco Koloman Moser, con fachada de mosaico marrón salpicada de ventanas elípticas, que es ejemplo de arquitectura art nouveau. También buena elección son The Guest House (theguesthouse.at) y Altstadt (altstadt.at), y más económicos, Ruby Lissi (ruby-hotels.com), 25hours-hotels.com (25hours-hotels.com) y Grätzl (urbanauts.at).

11/16 ©

DESCUBRIR EL OTTO WAGNER MÁS DESCONOCIDO

Para conocer más del Modernismo vienés hay que seguir los pasos a Otto Wagner por el barrio 14, donde al arquitecto estrella construyó una obra completa: la Weisse Stadt o Ciudad Blanca, compuesta por un hospital, un teatro de estilo modernista y la iglesia de san Leopoldo. Hay visitas en español y para llegar a ella se puede coger el 49 en el Parlamento / © WienTourismus - Christian Stemper

12/16 ©

COMER EN UN VEGETARIANO CON ESTRELLA MICHELIN

Pocos placeres mayores que sentarse a una mesa y disfrutar de la gastronomía. Y en Viena, uno de ellos es comer en Tian, (tian-vienna.com), un verdadero templo gourmet vegetariano cuyas creaciones son obra del chef Paul Ivic. Su cocina, según la guía Michelin, que la ha reconocido con una estrella, es expresiva, llena de contrastes y muy refinada. Y apetece probarla. Para un capricho, el menú de diez platos sale por 139 €. Más informal, su bistró (tian-bistro.com), en el barrio de Spittelberg / ©  Restaurante Tian - Ingo Pertramer

13/16

SUBIR A UNA TERRAZA CON VISTAS

Para tomar perspectiva de la capital vienesa nada como subir a los últimos pisos de sus edificios de diseño y contemplar la panorámica mientras se disfruta de una comida o un cóctel. Entre las alturas a las que trepar, la del restaurante del hotel boutique DO&CO (docohotel.com), el hotel Lamee (hotellamee.com), el Sofitel (sofitel.com), en la imagen, asomado al canal del Danubio; el bar Sky, en la séptima planta del edificio Steffl; la torre DC 1, diseñada por Dominique Perrault, o el bar de la azotea del hotel Ritz Carlton (ritzcarlton.com).

14/16 ©

TOMAR UN CAFÉ EN UN LUGAR CON HISTORIA

Ningún otro café de Viena tuvo tantos genios entre su clientela habitual como el Café Museum (cafemuseum.at), en el que se dejaban ver los pintores Gustav Klimt, Egon Schiele y Oskar Kokoschka, los escritores Karl Krauss y Elias Canetti, o los arquitectos Otto Wagner y Adolf Loos. Pero la capital austriaca tiene muchos más cafés con historia, como el Central (cafecentral.wien/en), en la imagen, Landtmann, Sperl, Schwarzenberg, Sacher, Prückl, Hawelka o Bräunehof. Mejor probar varios, porque decidirse no es tan fácil / ©  Café Central at Palais Ferstel, Vienna

15/16

CONOCER LA FÁBRICA DE PORCELANAS MÁS ANTIGUA DE AUSTRIA

Fundada en 1714, Augarten (augarten.at) no solo es la fábrica de porcelana más antigua de Austria, también la segunda de Europa. Después de admirar sus creaciones fabricadas y pintadas a mano, puedes llevarte a casa alguna de sus piezas, como un juego de café diseñado por el mismísimo Josef Hoffmann, uno de los fundadores de los talleres vieneses de principios del siglo XX. Eso sí, cada taza, a partir de 250 €, pero modernismo puro.

16/16

COMPRAR JOYAS DE ESTILO MODERNISTA

Y para una escapada con mucho arte, nada como hacerte con una joya inspirada en el modernismo y en artistas como Gustav Klimt o Egon Schiele. En Frey Wille (freywille.com) encontrarás joyas artesanales, pero también relojes, bolsos, pañuelos, estilográficas y muchos otros complementos para mujer y hombre.

Más sobre: