EN TREN MINERO POR EL SOPLAO (CANTABRIA)
El aliciente de la visita a esta cueva (elsoplao.es), sin ningún tipo de barreras, es el viaje en un coqueto tren minero que, después de recorrer unos 400 metros, deja al visitante, en la misma puerta de entrada. Ya bajo el subsuelo y, a través de una antigua galería minera, se inicia el recorrido, de unos 1.500 metros de longitud, que permite disfrutar de este auténtico paraíso natural. Si en la galería de los Fantasmas llama la atención la cantidad de blanquecinas estalagmitas y pisolitas emergiendo del suelo que le dan nombre; en la Gorda es la laguna subterránea natural o el color de las estalactitas del techo, cubierto de helictitas de calcita. En la pequeña galería del Falso Suelo son las formaciones rocosas en forma de finos hilos enroscados y en la del Campamento, las coladas teñidas de rojo y blanco. También están las de la Coliflor, El Bosque, Génesis... cada una con sus secretos. Además de la visita turística, esta cueva cántabra brinda otra de aventura, una ruta de 2,5 horas que lleva a las zonas menos accesibles de la cavidad y que implica ir equipado con casco con luz, buzo y botas de agua.