Picos de Europa en 11 instantáneas, un paseo por sus pueblos, desfiladeros, lagos…
De la ruta del Cares a los lagos de Covadonga o del Naranjo de Bulnes a Fuente Dé. Imágenes que invitan a más de una escapada por este parque nacional y sus tres vertientes: asturiana, cántabra y leonesa.
De la ruta del Cares a los lagos de Covadonga o del Naranjo de Bulnes a Fuente Dé. Aquí tienes una colección de imágenes que invitan a más de una escapada por este parque nacional y sus tres vertientes: asturiana, cántabra y leonesa. Pasa página y descúbrelas.
REAL SITIO DE COVADONGA
Las cuevas suelen ser lugares mágicos y cargados de leyenda. Y la Cueva Santa lo es, porque fue en ella donde Pelayo y unos pocos hombres se refugiaron antes de iniciar la batalla contra las tropas árabes, de la que salieron vencedores por intercesión de la Virgen, iniciando así la Reconquista. Hoy, en ella, se venera a la Patrona de Asturias, la Santina, una imagen del siglo XVIII que comparte espacio con las tumbas del Rey Pelayo, su mujer, su hermana y Alfonso I. Fue junto a la cueva donde se construyó a finales del XIX una gran basílica de estilo neorrománico dedicada a la Virgen y abierta a una gran explanada que es uno de los principales enclaves de peregrinación para los cristianos. Los edificios de la colegiata y la hospedería completan el conjunto de dependencias que forman el Real Sitio de Covadonga. Junto a la basílica también se encuentra una estatua de bronce dedicada a Pelayo y, próximo, el obelisco de piedra rosada con la Cruz de la Victoria, que se alza en el lugar exacto donde, según la tradición, Pelayo fue proclamado Rey por los astures.
LAGOS DE COVADONGA
Una sinuosa carretera que salva increíbles desniveles y abruptos precipicios asciende desde el santuario de Covadonga a otro santuario (pero este natural), el de los lagos de Covadonga, situados a 1.000 metros de altitud. Un conjunto de lagunas entre las que sobresalen los lagos de Enol, el de mayores dimensiones, y de Ercina, rodeados de excelentes prados donde vacas, caballos y ovejas pastan libremente. En el camino merece la pena hacer un alto en el mirador de la Reina para admirar con distancia la acción de los glaciares en el corazón montañoso de los Picos de Europa.
COSGAYA
Muy cerca del teleférico de Fuente Dé y del monasterio de Santo Toribio de Liébana está este pequeño pueblo del municipio de Camaleño en el valle del río Deva que atrae por su emplazamiento, por el paisaje montañoso que le rodea y también por sus casas nobles escudadas que hoy acogen pequeños hotelitos o casas rurales con encanto.
TELEFÉRICO DE FUENTE DÉ
A los pies de los Picos de Europa donde nace el truchero y salmonero río Deva se emplaza el teleférico de Fuente Dé, que comunica con el mirador del Cable, un espectacular balcón natural a 1.850 metros de altura que despliega una panorámica inmensa hacia las cumbres de Picos de Europa y los profundos valles lebaniegos, en Cantabria. Sus cabinas rojas salvan, en menos de cuatro minutos, los 753 metros de desnivel entre la base y el mirador, para desde aquí emprender alguna ruta enmarcada en estos roquedos, como la que desciende hacia los puertos de Áliva.
POSADA DE VALDEÓN
En el corazón de los Picos de Europa leoneses y cerrado por un rocoso horizonte en el que sobresalen los verticales murallones de Torre Bermeja, Torre Cerredo y Llambrión se esconde entre praderas, el valle de Valdeón, drenado por el río Cares y salpicado de pintorescos pueblos entre rocas, hayedos y praderas. Posada de Valdeón ejerce de capital administrativa y en él abundan las casas de piedra con solanas de madera y hórreos. También reseñables son las pinturas al fresco del siglo XVI de su iglesia parroquial.
MOGROVEJO
A 12 kilómetros de Potes en dirección a Fuente Dé y rodeada de altas cumbres, la pequeña aldea de Mogrovejo merece una parada para admirar su hermoso conjunto de casonas de los siglos XVII y XVIII, a mitad de camino entre lo rural y lo señorial, en las que puede verse el escudo familia de las familias nobles que antaño las habitaban, y entre las que sobresale una torre medieval.
POTES
Potes es una villa con mucho encanto y en un sitio estratégico, por aquí pasan los que se dirigen a las cumbres de los Picos de Europa, los que se adentran desde la costa por el desfiladero de La Hermida, los que peregrinan al monasterio de Santo Toribio de Liébana y los que van en busca de Santa María de Lebeña, el mejor ejemplo de arte mozárabe de Cantabria Y luego tiene tanta historia como sabor y encanto rural: sus puentes, su barrio de La Solana, la torre del Infantado, los quesos, el orujo…
NARANJO DE BULNES
No es el pico más alto de la cordillera Cantábrica, pero su perfil es inconfundible. El Naranjo de Bulnes (también conocida como Pico Urriellu) es una montaña mítica e histórica en el desarrollo del alpinismo español. Emplazada en el concejo asturiano de Cabrales, desde siempre, los pastores de los Picos de Europa consideraron que el Naranjo, que recibe el nombre del color del que se visten sus paredes a la caída del sol, era innacesible hasta para los mismos rebecos que se mueven por estos lares, hasta que en 1904 los montañeros Pedro Pidal y Gregorio Pérez llegaron a su cumbre, a 2.519 metros de altura. Se accede a ella desde el pueblo de Sotres.
BULNES
En uno de los parajes más espectaculares y aislados de Picos de Europa se esconde este pueblo al que solo se puede acceder con el funicular que funciona diariamente y atraviesa la montaña. Con unas pocas decenas de habitantes a lo largo del año, su población aumenta en verano para disfrutar de su espectacular entorno. Es un lugar perfecto para emprender rutas y disfrutar del majestuoso paisaje que le rodea. Una vez arriba no hay que perderse las impresionantes vistas del Pico Urriellu, y en Cabrales, concejo al que pertenece, visitar la Cueva del Quesu para conocer la historia del manjar más famoso de Cabrales.
RUTA DEL CARES
Entre los tajos naturales que atraviesan el corazón de los Picos de Europa, el que hace el río Cares en su camino hacia la costa es uno de los más espectaculares. El desfiladero se abre entre Caín, en León, y Puente Poncebos, en Asturias. Una senda lineal de 11 kilómetros que discurre a media altura y atraviesa esta ‘Garganta Divina’ –el apelativo con el que se conoce a este estrecho pasillo tallado por el río– que pasa por grutas, puentes y senderos esculpidos en la roca. A la hora de realizar el itinerario es importante planificar convenientemente el regreso, porque si se quiere hacer completa y volver al punto de partida por carretera habrá que procurarse un taxi de montaña que recorra los más 100 kilómetros entre principio y final.