El bienestar y la relajación al más alto nivel son pilares básicos de una estancia en el hotel Seaside Palm Beach de Gran Canaria gracias a su moderno y lujoso spa y área wellness. Un espacio inmerso en un gran palmeral enfocado tanto a los huéspedes que buscan un tiempo de desconexión y relax como a los que necesitan un tratamiento concreto.
Cuenta con sauna finlandesa, bio-sauna, con cromoterapia y aromaterapia, también baño de piedra y una sorprendente cueva de sal para cuidar los problemas bronquiales y de piel. Hay también hamacas para relajarse entre palmeras en un espacio decorado en línea con el entorno natural, y salas destinadas a tratamientos faciales y corporales, baños de crema, curas con ozono y tratamientos anti- envejecimiento.
El disfrute sigue en las piscinas de agua salada, que aporta beneficios al cuerpo en muchos aspectos. La mejoría se nota a través de distintas terapias, chorros de hidromasaje, natación contracorriente, cuellos de cisne, camas de masaje. La lista que se ofrece es larga: relajación, drenaje, anticelulitis, con piedras volcánicas y la gama pantai, a base de saquitos de hierbas medicinales que actúan contra las contracturas en diferentes partes del cuerpo.
El spa del Seaside Palm Beach está a la última en terapias, aromaterapia, baños Rasul o talasoterapia, pero ozonoterapia, timoterapia y sueroterapia son también opciones que probar. Y no faltan todo tipo de tratamientos personalizados de salud, de belleza.
Y como no todo va a ser relajación, también hay momentos para estar activos y para no dejar de entrenar durante las vacaciones, el hotel cuenta con una completa zona fitness, con la última maquinaria del mercado y donde apuntarse a clases de gimnasia, aeróbic, yoga o taichí o contratar un entrenador personal para tener un programa a su medida.