Diez motivos para perderte en Austria y disfrutar de sus mejores escenarios

SALZBURGO
La ciudad natal de Mozart y también la de Sonrisas y Lágrimas es una coquetísima ciudad Patrimonio de la Humanidad cercada de montañas, con la fortaleza de Hohensalzburg gravitando sobre ella y un encantador casco antiguo adornado de palacios, iglesias y castillos, además de museos y galerías de arte que, junto a con sus numerosos eventos culturales, como el festival de Salzburgo (en la imagen), otorgan a la ciudad un encanto inigualable. Para encanto el de subirse al Schafbergbahn, el ferrocarril de cremallera más empinado de Austria que, en verano, lleva desde el lago St. Wolfgang a la cumbre de la Schafberg (1783 m). O al tren Pinzgauer, un ferrocarril a vapor de vía estrecha que lleva hasta la bonita ciudad de Zell am See, a orillas del lago Zell y a los pies de los Alpes / © Tourismo Salzburgo.

VACACIONES EN GRANJAS TIROLESAS
El corazón de los Alpes austriacos es un reino de praderas, bosques, cascadas, bucólicos pueblitos y granjas donde pasar unas idílicas vacaciones de verano disfrutando de la hospitalidad austriaca, de desayunos con pan recién horneado y mermelada casera, de paseos en bici o a caballo por las montañas, excursiones, chapuzones en los lagos, animales que los niños pueden cuidar en los establos… Todo muy familiar y muy auténtico para amantes de la naturaleza en los valles más bonitos del Tirol / © Urlaub am Bauernhof.

Y en el Tirol:

Praderas de cuento en el altiplano de Mieming, un bellísimo rincón del Tirol    

GRAZ
Callejuelas y soportales medievales, palacios renacentistas e iglesias barrocas adornan el casco histórico de la segunda ciudad de Austria, Patrimonio de la Unesco, que fue Capital Cultural Europea en 2003. Situada a orillas del Mur, esta cosmopolita ciudad que fue ciudad imperial tiene en su castillo de Schlossberg, su catedral de estilo gótico tardío, las panorámicas que despacha la colina de Schlossberg, el edificio Kunsthaus, sus festivales culturales y en su gastronomía más motivos para disfrutar / © Enjoy mediterraneanflair at Mehlplatz in Graz- Werner Krug.

VIENA
La capital austriaca es una ciudad nacida para impresionar. Ahí están para demostrarlo el palacio de Hofburg y el de palacio de Schönbrunn, la viva imagen de esa Viena imperial de postal y donde buscar las huellas de la Emperatriz Sisi; el impactante MuseumsQuartier –el barrio de los museos, 90.000 m2 de arte, cultura y creatividad reunidos en un solo espacio; la Casa de la Música –donde nació la Filarmónica de Viena–, pero también sus barrios alterativos y su nueva arquitectura. Para no perderse ninguno de ellos y moverse por la ciudad nada más fácil que adquirir la Vienna Pass, este billete turístico con todo incluido que ofrece entradas gratuitas a más de 60 atracciones, uso ilimitado de los autobuses turísticos, entradas preferentes, además de descuentos en restaurantes, cafeterías, hoteles… La hay para 1 día (59€), 2 (74 €), 3 (89 €) o 6 (114€) días consecutivos. Para niños de 6 a 18 años, el precio se reduce a la mitad /  © kmoe-museumsquartier wien (c) Herta Hurnaus.

LINZ
Para mirar al futuro, relajarse en un bonito entorno natural, degustar una tarta típica en su casco antiguo barroco y admirar el arte grafitero. Linz es una simbiosis de arte, cultura y naturaleza y se transforma en los meses de verano en un escenario al aire libre. La capital de la Alta Austria ha sido nombrada City of Media Arts por la Unesco, una milla cultural a orillas del Danubio con numerosos edificios de arquitectura moderna entre los que destaca el Ars Electronica Center. Su oferta cultural abarca desde la ópera más moderna de Europa hasta el Mural Harbor, la galería de grafitiis más grandes con cientos de obras de arte en el puerto / © Linztourismus - Johann Steininger.

INNSBRUCK
La capital de los Alpes y el Tirol es una ciudad de ambiente palaciego, aunque son las cumbres alpinas que la rodean las que acaparan gran parte de la atención, porque en solo media hora se puede llegar desde su centro histórico medieval a alcanzar los 2000 metros de altitud. La naturaleza en Innsbruck queda a un paso. Tan espectaculares son las vistas desde la ciudad que el emperador Maximilian I hizo poner en el mirador de su residencia un Tejadillo de Oro para gozar de la estampa, hoy es uno de sus más destacados lugares. © Innsbruck Tourismus.

Descubrir sus ciudades imperiales, pasar unas vacaciones en una granja tirolesa, recorrer la Ruta Romántica, explorar las cristalinas montañas de la región de Hall Waters, conocer la ciudad natal de Mozart, disfrutar de la gastronomía en Graz, subir al tren de cremallera más empinado de Austria...

LA RUTA ROMÁNTICA
Entre las ciudades imperiales de Viena y Salzburgo se extiende uno de los recorridos más bellos de Europa, un viaje cultural y culinario que discurre a lo largo de 380 kilómetros. En el camino, una treintena de lugares de interés que invitan a detenerse como el pueblo de Hallstatt, Patrimonio de la Humanidad, la pequeña ciudad de Bad Ischl –residencia veraniega del Emperador Francisco José I y Sisí–, la romántica ciudad de Steyr, una de las joyas arquitectónicas del are medieval, el monasterio benedictino de Melk, Krems an der Donau –considerada la ciudad más importante a orillas del Danubio– y la pintoresca ciudad de Tulln. En la imagen, Schloss Ort, el original castillo situado en el lago Traunsee / © Ferienregion Traunsee.

HALL WATTENS
En pleno corazón del Tirol, la región de Hall Wattens reúne un puñado de pueblos idílicos (Absam, Baumkirchen, Fritzens…), además de Hall in Tirol, una de las ciudades históricas más bonitas de Austria. Naturaleza y cultura, tradición y modernidad, ambiente urbano y recogimiento rural para los 365 días del año. Entre sus destinos más atractivos: el casco histórico de la ciudad de Hall hasta la basílica de peregrinación de Absam y El Mundo de Cristal de Swarovski, que forma parte del ‘triángulo de los cristales’, donde explorar las cristalinas montañas de la región siguiendo el rastro de los cristales de roca y sal / © Swarovski Kristallwelten .

ARLBERG
La región de Arlberg es un paraíso de nieve insuperable, un destino vacacional entre Vorarlberg y el Tirol que acoge algunas de las mejores estaciones de esquí del mundo, como St. Anton am Arlgberg y Lech Zürs, cargadas de glamour y frecuentadas por la jet internacional y miembros de las casas reales. Cuando se conocen es fácil entender la razón: pistas magníficas, pueblos de postal, los más modernos mecánicos, un animado aprés-ski diario y unos paisajes de ensueño. La calidad está garantizada en los remontes, en los hoteles, en las pistas… Todo resulta de una perfección absoluta. © Sepp Mallaun.

ÖBB 
Viena-Salzburgo en 2 horas y 22 minutos; Viena-Graz, en 2 horas y 30 minutos, y Viena-Innsbruck en poco más de 4 horas. Los trenes de ÖBB (ferrocarriles austriacos) acercan con rapidez las ciudades austriacas, mucho más con los trenes Railjet, de alta velocidad. Desde el aeropuerto de Viena salen cada media hora para viajar en todas direcciones / © ÖBB - Philipp Horak.

Y en Austria no te pierdas:

Los 20 lugares más bonitos de Austria

Los 10 pueblos más bonitos de Austria