En la capital nos gusta salir, y además a cualquier hora: a la del aperitivo, a comer, cenar o a rematar la noche. Cada vez son más los locales que han creado espacios acristalados o acondicionados donde se está requetebien para desafiar a las bajas temperaturas y pasar buenos momentos. Las terrazas, está claro, ya no son solo para el verano.
SAPOREM
Cenar en esta terraza de estilo vintage (the-saporem.tumblr.com), prolongación de su elegante interior, no solo es una delicia por su decoración, también porque, con un techo que se abre o se cierra según el tiempo, el ambiente de este restobar es de lo más animado. De miércoles a domingo las veladas se ambientan con música en directo, pero también se puede disfrutar de pop up markets , brunch los fines de semana, barra de cócteles, Cakes&Tonics –un maridaje de tartas con gin tonics o vodka tonics) y una original carta donde coinciden platos tradicionales, con sabores más internacionales, acompañados de vino Moscato o las sangrías de la casa. Además de este local de Ventura de la Vega, en el barrio de Las Letras, Saporem también cuenta con otro local en la calle Hortaleza, en el barrio de Chueca, también con un patio de lo más acogedor para una tarde-noche muy agradable.
DOÑA TECLA
Una inmensa jaima cubre la terraza de este local (donatecla.es) próximo al estadio Santiago Bernabéu que resulta de lo más cálida por su decoración colorista, sus hamacas y velas, sus calefactores de llama... En sus 200 metros uno tiene la sensación de estar de vacaciones, a cualquier hora del día, lo mismo para el picoteo, que para la comida o las copas. Así se saborean platos para compartir, para comer solo, de un bocao, exóticos para foodies, para meat lovers…
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LA TERRAZA DE LA REINA
Esta terraza (grupomercadodelareina.com) abierta en la plaza Vázquez de Mella, entre la Gran Vía y el barrio de Chueca, es una referencia a cualquier hora del día para desayunar, comer de menú o picotear platos de su carta informal: hamburguesas, ensaladas, pizzas, sandwiches calientes... Y no solo del día, también de la estación, porque se adapta a la climatología. Ahora que es invierno, sus sillas se cubren con mantitas y así, claro, no se pasa frío.
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LA CONTRASEÑA
De clara inspiración colonial, el salón central de La Contraseña (restaurantelacontrasena.com), en el barrio madrileño de Chamberí, es un lugar para pasarse un buen rato en sus diferentes ambientes, pero es su patio cubierto que da paso a una antigua vaqueriza recuperada la que más apetece en estos días fríos, por su luz y su amplitud. Un lugar donde disfrutar de una carta fresca, dinámica, con cocina mediterránea y de mercado en un ambiente cosmopolita.
MERCADO DE SAN ILDEFONSO
En la bulliciosa calle Fuencarral, el primer street food market de Madrid (mercadodesanisldefonso.com) ha encontrado su inspiración en los de Londres, Nueva York o Bangkok, pero también en los mercados tradicionales, como al que le debe su nombre, para convertirse en un lugar donde disfrutar de la gastronomía muy especializada, de un break durante las compras o como punto de encuentro para vecinos, turistas y asiduos de Malasaña, Chueca y Tribunal en horario after work. Tres plantas donde además de puestos gastronómicos hay tres barras y dos terrazas para disfrutar del mejor ambiente.
EL JARDÍN DE LA MÁQUINA
Un lado rodeado de olivos preside el jardín de esta antigua casa de campo de aire rústico ubicada en Pozuelo, a pocos minutos del centro de la capital, decorada con materiales naturales comprados en mercadillos de antigüedades de Europa. Un lugar para disfrutar del campo no solo con buen tiempo, porque en invierno, en su terraza, al calor de la hoguera, también se está muy calentito tomando un arroz o un pulpo a la brasa rodeado de naturaleza.