Dos paseos, dos experiencias y otras ideas prácticas para vivir Nantes
Cierra los ojos, inspira aire fresco, deja que la música callejera inunde tus oídos, prepara tu paladar, abre tu mente. Ahora sí, abre los ojos, estás preparado para disfrutar de una ciudad repleta de vida, vibrante, cosmopolita, creativa y única. Una ciudad que hace de la cultura su bandera y seduce porque representa la reinvención, el constante cambio, el movimiento. Arte, arquitectura, diseño, gastronomía, un hervidero de creación. Atravesada por el río Loira, la mágica ciudad de Julio Verne tiene mucho que ofrecer. Y para no perderte nada, tendrás que seguir la línea verde que, a lo largo de 12 kilómetros, recorre la ciudad.
Terrazas en Nantes / © J.D Billaud / Nautilus.
En el castillo de los duques de Bretaña de Nantes, de estructura robusta y estilo bretón, es fácil viajar en el tiempo al siglo XV / © LE GAL Yannick.
Visitando el castillo de los duques de Bretaña de Nantes.
La imponente catedral de San Pedro y San Pablo fue construida nada más y nada menos que en 500 años, lo que hace que posea rasgos arquitectónicos de varios periodos artísticos / © LE GAL Yannick.
En la isla de las máquinas, este elefante articulado de 12 metros de altura se pasea por las orillas del Loira / © Emmanuel Berthier.
Isla de las Máquinas, Nantes / © J.D Billaud / Nautilus
Nombrada Ciudad Verde europea en 2013, Nantes cuenta con 100 jardines urbanos y está muy concienciada con la hazaña ecologista. Una parada incuestionable en el camino es el Jardin des Plantes, uno de los botánicos más importantes de Francia y en pleno centro de la ciudad.
Los Anillos de Buren, en las orillas del Loira / © Franck Charel.
Palacio Ducal de Nantes / © Emmanuel Berthier.