Da igual la modalidad elegida: desde una fiesta modesta hasta un incombustible club, pasando por un evento formal de los que precisan etiqueta. La ciudad más divertida del norte alemán tiene todos los ingredientes para una Nochevieja inolvidable: confundirse con el bullicio urbano en las celebraciones en la calle, bailar hasta el amanecer o darse un atracón gastronómico en un refinado hotel.