Almendros, cerezos y lirios anuncian la llegada de la primavera. Y florecen las ganas de salir a pasear por parques y jardines para embriagarnos de su perfume y vivir este espectáculo efímero.
PARQUE JUAN CARLOS I
BAJO EL CEREZO JAPONÉS
Pasear por el bosque de cerezos en flor de este parque madrileño es lo más parecido a viajar a Japón. Fue, precisamente, la comunidad japonesa quien obsequió a la capital con 200 cerezos sakura y ahora es una tradición acudir en primavera a practicar el hanami bajo los árboles, una especie de pícnic que se hace contemplando las delicadas flores de sakura.

LA ROSALEDA
EL JARDÍN DEL PARQUE DEL OESTE
Para embriagarte del perfume de las rosas tienes que ir a este precioso jardín con más de 20.000 ejemplares y observar las variedades más tempranas, de mil colores. En mayo podrás votar por tu rosa preferida en el Concurso Internacional al que acuden cultivadores de todo el mundo.

La primavera transforma Madrid en un jardín mágico que solo dura unas semanas
EL REAL JARDÍN BOTÁNICO
ENTRE LIRIOS Y TULIPANES
Las flores anuncian la primavera y van haciendo su aparición en el Jardín Botánico. Los primeros en llegar son los narcisos, la primera floración de la primavera. Le siguen los tulipanes, más de 20.000 llegados de Holanda que desatan una auténtica 'tulipomanía'. Luego llegan las peonías y en abril los lirios.

HUERTO DEL FRANCÉS
PRIMAVERA EN EL RETIRO
Seguro que ha paseado una y mil veces por El Retiro, pero cuando el invierno toca a su fin, uno de los rincones que se llena de vida es el Huerto del Francés (el lugar donde se instalaron las tropas francesas). Es el momento de la floración de los almendros y de miles de plantas. Un espectáculo de gran belleza en el parque más hermoso de Madrid.

LA QUINTA DE LOS MOLINOS
UNA EXPLOSIÓN DE COLOR
No te puedes perder esta gran explosión de colores, blancos y rosas, de los casi 2.000 almendros en flor que llenan de primavera La Quinta de Los Molinos, un parque público, catalogado de Histórico, con un precioso palacete y la Casa del Reloj, situada en la zona nordeste de la capital al que acuden los amantes de la naturaleza para vivir este espectáculo efímero.
