Cantabria es la única región por la que pasan dos caminos de peregrinación: el Camino del Norte, que lleva a Compostela, y el Lebaniego (caminolebaniego.com), que une este con el Camino Francés y tiene como meta el monasterio de Santo Toribio de Liébana. Un lugar santo –uno de los 5 de la Cristiandad –como Jerusalén, Roma, Santiago y Caravaca de la Cruz– que surgió para venerar los restos de Santo Toribio, obispo de Astorga y donde se conserva una reliquia excepcional: el Lignum Crucis, el trozo más grande de la Cruz de Cristo.
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El Camino Lebaniego, que como el resto de los Caminos de Santiago del Norte, forma parte de la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, tiene 72 kilómetros de recorrido, está señalizado con una flecha roja junto a una cruz y se realiza en 3 etapas:
PRIMERA ETAPA
San Vicente de la Barquera-Cades
Distancia: 28,5 kilómetros
El bonito pueblo de San Vicente de la Barquera es el punto de partida de este viaje hacia el corazón de Liébana que, desde la costa, se dirige a la localidad de Muñorrodero, puerta de entrada al valle del río Nansa, por cuyas orillas discurren los primeros kilómetros del recorrido. El sendero fluvial, acondicionado con pasarelas e incluso áreas de descanso, lleva entre idílicos rincones hasta la ferrería de Cades, final de la primera etapa a pie. Un complejo hidráulico del siglo XVIII que puede visitarse para verla en funcionamiento (ferreriadecades.es).
SEGUNDA ETAPA
Cades-Cabañes
Distancia: 30,5 kilómetros
La peregrinación continúa por la CA-856 hacia las hoces de Lamasón para alcanzar Sobrelapeña y Lafuente. Después, prosigue el itinerario a pie por el mismo trazado que lo hacían los peregrinos antes de que en 1863 se abriera la primera vía transitable a través del desfiladero de La Hermida: hasta Lebeña y su bellísima joya mozárabe de Santa María por la canal de Francos para luego subir a Cabañes.
TERCERA ETAPA
Cabañes-Santo Toribio de Liébana
Distancia: 13,7 kilómetros
Desde Cabañes continuamos hacia Pendes, luego Tama (donde se encuentra el Centro de Interpretación del Parque Nacional de los Picos de Europa) y Potes, última parada para reponer fuerzas antes de afrontar los escasos tres kilómetros que dejan a las puertas del monasterio. Una vez allí el premio está no solo en venerar la reliquia del Lignum Crucis sino también en la visita a su magnífica iglesia gótica, el claustro y las ermitas de los alrededores. A 5 minutos andando, junto a la de San Miguel, hay un mirador espectacular sobre el valle de Camaleño que no puede ser mejor despedida al camino.
TIENES QUE SABER
Algunos peregrinos deciden hacer el Camino Lebaniego en 4 etapas y andar al día 5-6 horas, un trayecto más factible, que sigue otro trayecto, pero disfrutando de los mismos bellísimos paisajes montañosos cántabros.
Etapa 1: San Vicente de la Barquera-Santo Toribio de Liébana (25 km)
Etapa 2: Santo Toribio de Liébana-Tama (22 km)
Etapa 3: Tama-Potes
Etapa 4: Potes-San Vicente de la Barquera
El Camino Lebaniego posee una credencial específica acreditativa de la peregrinación llamada la Lebaniega que se puede solicitar en la web caminolebaniego.com donde además encontrar un montón de información útil para acometer el camino. Incluso puedes descargarte una app que informa de todo lo que se va encontrando a lo largo de las etapas.
Potes es la capital del valle de Liébana y un buen lugar para degustar el plato típico de la zona: el cocido lebaniego
DÓNDE DORMIR
En Prellezo, el hotel Valle de Arco (hotelvalledearco.com) es una casona montañesa de estilo rústico con una veintena de habitaciones y apartamentos de ambiente acogedor y amplio jardín con vistas al mar y a la montaña. Desde los ventanales de La Casona de Molleda (lacasonademolleda.com) se contempla el lento discurrir del río Deva y los Picos de Europa. Una bonita construcción indiana que combina el clasicismo y la elegancia con diseño más actual en su decoración.
A un lado de la carretera que discurre por el desfiladero por el que corre el río Deva se ubica el Balneario de la Hermida (balneariolahermida.com), con una cueva termal al aire libre alimentada por tres manantiales que brotan a 60 ºC de temperatura. Un alojamiento con una larga historia que se remonta al siglo XVII a los pies de los Picos de Europa.
DÓNDE COMER
En la comarca de Liébana, el plato que nadie se pierde es el cocido lebaniego. Lo elaboran en todos los restaurantes, pero quien elige Casa Cayo (casacayo.com), en Potes, sale muy satisfecho. Más creativas son las propuestas de La Soldrería (lasoldreria.com). A orillas del río Deva, La Juana también es un buen sitio para comer platos tradicionales rodeados de montañas. Orujos, miel de Liébana y los famosos quesucos, con D.O. los encontrarás en cualquier tienda del camino.