Maravillas de Brasil, todo lo que podrás descubrir en tu visita a Fitur

El país socio anfitrión va a dar mucho que hablar en la Feria Internacional de Turismo que se celebra del 22 al 26 de este mes en Madrid. En ella vas a encontrar las claves para disfrutar de tu primer viaje al destino.

9 de enero de 2025 - 14:52 CET9 ene 2025 - 14:52 CET

Brasil es un país inmerso que guarda, a su medida, grandes tesoros. Muchos naturales y otros tantos culturales. Si las paradisíacas playas de Río de Janeiro, el Amazonas, Pantanal e Iguazú hacen de él casi un continente de naturaleza desbordante; la vibrante vida urbana de Sao Paulo, el Carnaval, la Nochevieja en Copacabana, su gastronomía mundialmente reconocida y la calidez de su gente lo convierten en uno de los destinos más fascinantes. Empecemos por descubrir sus hot spots:

ROTA DAS EMOÇOES

Los amantes del ecoturismo, el turismo de aventura y los deportes al aire libre encontrarán su lugar en esta ruta que conecta los estados de Ceará, Piauí y Maranhão y tres de los destinos más fascinantes del noreste de Brasil: Lençóis Maranhenses, Delta del Parnaíba y Jericoacoara.

Vista aérea de Lençois Maranhenses, uno de los paisajes más espectaculares de Brasil, Patrimonio de la Humanidad

Lençóis Maranhenses

Enormes dunas de arenas blanquísimas y lagunas cristalinas de agua dulce forman este surrealista escenario del estado de Maranhão que la Unesco acaba de incluir en 2024 en su lista del Patrimonio Mundial. Una especie de desierto inundado al borde del Atlántico para descubrir en rutas en todoterreno, quad, a caballo, explorarlo a pie, sobrevolarlo en avioneta y contemplar algunos de los mejores atardeceres de Brasil. Se extiende a lo largo de 80 kilómetros de costa y hasta 25 kilómetros tierra adentro y alberga una gran biodiversidad. Los recorridos que se adentran en el espacio protegido parten en su mayoría de Barreirinhas o Santo Amaro, que se alcanzan tras aterrizar en el aeropuerto de Sao Luís, capital del estado de Maranhão.

Delta do Parnaíba, un laberinto de naturaleza salvaje

Otra de las joyas naturales del noreste brasileño es este paraíso ecológico del estado de Piauí que alberga un intrincado laberinto de islas, canales y manglares que ofrecen paisajes únicos y una biodiversidad impresionante. Los paseos en bote permiten conocer cada detalle de este ecosistema para observar guarás, aves de plumaje rojo vibrante y otros animales, una experiencia inolvidable. Otro atractivo del Delta es la interacción con las comunidades ribereñas, que ofrecen una inmersión en la cultura local. Es posible saborear platos regionales frescos, como cangrejo y camarón, y aprender sobre las costumbres y tradiciones de esta región exuberante.

Lagoa Paraíso, en Jericoacoara, Ceará, Brasil — Lagoa Paraíso, en Jericoacoara.

Jericoacoara, la costa del viento

En otro tiempo fue un pueblo de pescadores, ahora Jeri, como se conoce a cariñosamente a este destino del estado de Ceará, es el más deseado por los amantes del windsurf y kitesurf gracias a sus playas, a los vientos alisios constantes y a su ambiente surfero. La praia Principal, frente a la Vila de Jijona es una gran opción para el stand up paddle, la de Pedra Furada, con su roca esculpida por la acción del mar, regala la postal perfecta, y Lagoa Paraíso es una de las favoritas para los que buscan relajación en sus tradicionales hamacas sobre el agua. A la de Mangue Seco, donde se ven caballitos de mar en su hábitat natural, solo se puede llegar en barco. A medida que el sol se pone cada día sobre las dunas, los restaurantes frente a la playa cobran vida.

RÍO DE JANEIRO

La más vibrante de las maravillas de Brasil no podía ser otra que la “Ciudad Maravillosa” tan extensa que sus perfiles se aprecian mucho mejor desde las alturas. Con paisajes icónicos como el Cristo Redentor, que corona el cerro Corcovado y abraza toda la ciudad, elegido una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno, y el Pan de Azúcar, Río es una celebración de la naturaleza y la cultura. Sus playas mundialmente conocidas de Copacabana e Ipanema invitan al contacto con el estilo de vida carioca. Y su Carnaval, un espectáculo de colores, música y alegría atrae a millones de visitantes cada año. De la belleza de la ciudad también da buena cuenta el Parque Nacional de Tijuca, donde se encuentra el Cristo, que ofrece senderos, cascadas y vistas panorámicas impresionantes.

MANAOS

Cultura y naturaleza se mezclan en esta ciudad situada en el corazón de la Amazonía, la mayor selva tropical del mundo. Si el Teatro Amazonas es su símbolo arquitectónico, que refleja la riqueza histórica de la región gracias al caucho, la naturaleza circundante es un espectáculo aparte, pues en ella tiene lugar un fenómeno único, el encuentro de las aguas de los ríos Negro y Solimões, que corren uno al lado del otro sin mezclarse. Manaos también es la puerta de entrada para excursiones por la selva amazónica, con paseos que incluyen avistamiento de animales, caminatas guiadas y visitas a comunidades ribereñas e indígenas.

ALTER DO CHAO

Ubicada en el estado de Pará, esta pequeña localidad va a dar mucho que hablar este año, pues es la ciudad anfitriona de la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2025, también llamada COP30, la primera que se celebrará en el corazón de la Amazonía. Más allá de ello, Alter do Chao es dueña de unos paisajes naturales extraordinarios, con playas fluviales de arena blanca y aguas cristalinas en las márgenes del río Tapajós, sobre todo la famosa Isla del Amor, y la selvática Floresta Nacional do Tapajós, donde ver de cerca la vegetación amazónica. No hay que perderse tampoco un paseo en barco para visitar a las comunidades ribereñas y conocer su rica cultura local, probar la cocina paraense y tapajónica y subir al Morro da Piraoca para contemplar todo su entorno.

Jaguar en el Pantanal, Brasil — Jaguar en el Pantanal.

EL PANTANAL, PARAÍSO DE VIDA SILVESTRE

El mayor ecosistema húmedo del planeta es un verdadero santuario de biodiversidad y un paraíso para los amantes de la naturaleza, donde observar de cerca la rica fauna y flora brasileñas. Cruzar la mirada con un jaguar, maravillarte con el colorido vuelo de los guacamayos, observar osos hormigueros gigantes y quedar fascinado con la habilidad nadadora de las nutrias son algunas de las experiencias inmersivas que se pueden vivir durante los paseos en barco y los safaris fotográficos por este ecosistema dividido en dos zonas: el Pantanal Norte, accesible desde Poconé (Cuiabá es el aeropuerto más cercano, conectado con Sao Paulo), y el Pantanal Sur, a la que se llega desde Campo Grande.

Conduciendo por la carretera Transpantaneira, la pista de tierra de 150 kilómetros que cruza el Pantanal, un buen número de pousadas o fazendas son ahora reservas naturales privadas donde además de hacer noche, se ofrecen actividades de observación y permiten conocer las tradiciones y el modo de vida de los pueblos locales, promoviendo un turismo sostenible y responsable.

DATOS PRÁCTICOS

DOCUMENTACIÓN

Brasil no exige visado a los españoles, pero sí pasaporte con al menos 6 meses de vigencia desde la fecha de entrada. Es posible permanecer en el país por turismo hasta 90 días y es necesario tener billete de regreso o hacia otro destino como prueba.

CÓMO LLEGAR

Varias aerolíneas (Iberia, Latam Airlines y Air Europa) ofrecen vuelos directos entre España y Brasil que conectan Madrid y Barcelona con los aeropuertos internacionales de São Paulo y Río de Janeiro y, estacionales, con Salvador de Bahía, a partir de 634 €. La duración es de entre 10 y 12 horas. Un tour de 11 días que abarca São Paulo, Río de Janeiro, Iguazú y Salvador de Bahía puede partir desde 2700 €.

CUÁNDO IR

Brasil tiene un clima tropical en la mayor parte del país, con variaciones dependiendo de la región que se vaya a visitar. Hay dos temporadas principales, el verano (de diciembre a marzo), la lluviosa, con temperaturas entre 25 y 35 ºC, y el momento para disfrutar de las playas y el famoso Carnaval. En invierno, de junio a septiembre, la temporada seca, las temperaturas son más frescas y es la época ideal para explorar el Amazonas y visitar Iguazú. La transición entre ambas es perfecta para viajar con menos aglomeraciones.

DIFERENCIA HORARIA

Debido a su gran tamaño, Brasil tiene varios husos horarios, con una diferencia de 4 horas menos que en España, 5 desde el último domingo de marzo hasta el último de octubre.