Las 7 mejores escapadas cerca de Barcelona para terminar o empezar el año
Actividades en la nieve, casitas rurales en las que desconectar, mercados medievales, un belén viviente… no necesitas recorrer grandes distancias para vivir unos días especiales en diciembre o enero.
Si te apetece acabar el 2024, o empezar el 2025, con una escapada, estas que te proponemos seguro que te van a encantar. En la mayoría ni siquiera es necesario salir de la provincia, o si lo haces será realmente cerca, pero en todas vas a desconectar, recargar pilas y reconectar contigo, algo realmente necesario para coger fuerzas para un 2025 que seguro nos trae muchas cosas buenas. Sin duda, estas escapadas son la mejor manera de comenzar el año.
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Toma nota de estas fechas: 26, 28, 29 de diciembre y 1 de enero y no te pierdas la quinta edición del pesebre viviente de Món Sant Benet (monsantbenet.com), el único que tiene lugar en el interior de uno de los conjuntos monásticos medievales mejor conservados de Cataluña. Si quieres ver al centenar de actores que participan, tienes que viajar a la localidad de Sant Fruitós de Bages, donde se encuentra este monasterio benedictino que también es hotel, por si decides quedarte a dormir.
Los meses de invierno invitan a realizar actividades en la nieve más allá del esquí, como esta que te proponemos en los bellos paisajes del Prepirineo. Las excursiones se realizan en Rasos de Peguera y acompañados por guías de montaña, con lo que son seguras y aptas para toda la familia. Empresas como Relleus Gent de Muntanya (relleus.cat) realizan esta actividad sábados y domingos con material incluido.
En Vallromanes, a unos 25 kilómetros de Barcelona, encontramos el primer ecoresort totalmente ecológico de la península (massalagros.com). Situado en una antigua masía de 1497, en una reserva natural con vistas al parque protegido de la Serralada Litoral, tiene entre sus puntos fuertes la gastronomía, fusionando el sello ecológico en sus materias primas con las técnicas culinarias más avanzadas. Para una inmersión total en el bienestar más absoluto, no dejes de probar su centro wellness gestionado AIRE Ancient Baths.
Llega la Navidad y con ella el tradicional Mercado Medieval de Vic, que aún puedes visitar los días 23, 24, 28 y 29 de diciembre y 2 y 3 de enero. Aprovecha la escapada para recorrer esta localidad que se transforma en una típica población medieval con más de 30 puestos repartidos por las calles del centro histórico, en los que los artesanos ofrecerán artículos de decoración, joyería, títeres, pintura, ropa o productos gastronómicos locales. También habrá animadores, exhibiciones y actividades pensadas para que el día se convierta en un excelente plan para hacer en familia.
Si te apetece degustar cocina tradicional catalana de alta montaña, donde cada plato evoca la riqueza de esta tierra y es el reflejo de una cuidada tradición, tienes que viajar hasta el corazón del valle de Camprodon, en el Pirineo catalán, donde Dolores y José ofrecen una cuidada gastronomía en el restaurante del hotel La Fonda Rigà (fondariga.com). Para alargar la escapada, podrás alojarte en acogedoras cabañas de madera con los servicios de una suite.
¿Qué mejor excusa para visitar este temático que la Navidad? Y es que entre el 23 de noviembre y el 6 de enero se transforma gracias a la decoración navideña. Podrás asistir a sus espectáculos más emblemáticos, como Christmas Dream, un espectáculo musical en el Gran Teatro Imperial, y otros shows emblemáticos como Bubble Magic Christmas, Christmas Time o Christmas Parade, el desfile de carrozas que despide la jornada. El 5 de enero celebrará la noche de Reyes con una excepcional cabalgata.
Enclavado en una de las zonas más vírgenes del Pirineo catalán, el valle de Núria se rodea de montañas que casi alcanzan los 3000 metros de altitud, con suaves laderas cubiertas de nieve durante el invierno. Al fondo del valle se levanta el monasterio de la Mare de Déu de Núria, el segundo lugar de peregrinación más frecuentado en Cataluña después de Montserrat. Para conocer este encantador valle hay que acercarse a Ribes de Freser, donde un tren parte a diario hacia el valle, que también tiene parada en Queralbs, donde comienza el sistema de cremallera para ascender salvando 12,5 kilómetros y un desnivel de 1000 metros. Durante el invierno, el valle cuenta con una estación de esquí, con 7,6 kilómetros de pistas, con 4 niveles distintos de dificultad.
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