Haciendo meditación en el hotel Can Lluc, Sant Rafel, Ibiza© Andrés Campos

Refugios de otoño: 5 hotelitos para reconectar contigo mismo y con la naturaleza


31 de octubre de 2024 - 7:45 CET

Estos cinco hoteles rurales con encanto son idóneos para disfrutar del crepúsculo del año buscando setas, observando pájaros o, simplemente, mirándonos el ombligo en el hammam o en la piscina, porque en alguno de estos lugares –Córdoba, Huelva, Cáceres, Ibiza...–, en otoño sigue apeteciendo bañarse, con permiso de las danas.

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1. CAN LLUC (SANT RAFEL, IBIZA)

La gente del montón viaja a Ibiza en verano. La que sabe y puede, en cambio, se reserva para el otoño y elige, no un hotel de playa o de discoteca, sino el agroturismo Can Lluc (canlluc.com), que está en Sant Rafel, en el corazón de la isla, rodeado de pinos, estrellas y un silencio de cámara acorazada. 

© Can Lluc

Las villas de Can Lluc en Ibiza ofrecen un refugio perfecto en medio de la naturaleza, combinando lujo y tranquilidad en un entorno mediterráneo exclusivo. Cada villa cuenta con vistas espectaculares, privacidad total y todas las comodidades para una estancia inolvidable.

© Can Lluc

Las instalaciones exteriores de Can Lluc incluyen, además de una piscina rodeada de jardines, terrazas para el descanso y agradables zonas de chill-out para disfrutar bajo el sol otoñal ibicenco.

Si el silencio te agobia, a 15 minutos está la capital. Si te mola y quieres más, a 17 tienes el parque natural de Ses Salines, donde solo oirás a las aves –flamencos, chorlitos comunes, tarros blancos y zampullines cuellinegros– que disfrutan de Ibiza fuera de temporada, con buen criterio, como la gente que sabe y que puede. 

© Can Lluc

Las piscinas de las villas en Can Lluc ofrecen un espacio privado y exclusivo para relajarse, rodeadas de vegetación y con impresionantes vistas al campo ibicenco. Su diseño armoniza con el entorno, creando un oasis perfecto para disfrutar del sol en total tranquilidad.

En Can Lluc hay villas blancas lujosamente minimalistas de hasta 180 metros cuadrados, con jardín y piscina. Hay un buen restaurante de cuina de pagès. Hay clases de yoga a la sombra de los olivos y los algarrobos. Y hay el cariño inmenso de Lucas Prats, Tina y su hija Blanca, que hace que el huésped, al despedirse, derrame una lagrimita: “Alergia en otoño, ¡qué extraño! Será el cambio climático...” 

© Can Lluc

Las zonas de chill-out de Can Lluc son ideales para desconectar, con cómodos sofás al aire libre y áreas sombreadas entre jardines mediterráneos. Estos espacios invitan a relajarse y disfrutar de la paz y belleza natural de Ibiza.

¿Clientes famosos? Por respeto a Lucas, que nos ruega discreción, solo diremos que por Can Lluc ha pasado un guitarrista con chistera, un actor pelirrojo de CSI Miami, un ciclista que se fumaba un purito escalando los puertos más exigentes y varios exfutbolistas –y luego entrenadores– del Barça. Uno de estos últimos le pidió aquí la mano a la que ahora es su mujer. La verdad es que, si nos lo pide en Can Lluc, nos casaríamos hasta con el feo de la chistera: “Oh, oh, oh, sweet child of mine / Oh, oh, oh, oh, sweet love of mine”.

2. HÁBITAT CIGÜEÑA NEGRA (VALVERDE DEL FRESNO, CÁCERES)

Otro ibicenco emprendedor, Simón Roselló, inauguró en 2021 el hotel ecochic Hábitat Cigüeña Negra (habitatcn.com), pero no en las Pitiusas, donde solo han visto algún ejemplar de Ciconia nigra en los documentales de La 2, sino en la sierra de Gata, en el noroeste de Extremadura, donde a esta ave se la puede contemplar cómodamente desde el observatorio que hay instalado al borde de una laguna, a 125 metros del hotel. 

© Andrés Campos

Los exteriores del Hotel Hábitat Cigüeña Negra en Cáceres destacan por su diseño en armonía con el entorno natural, rodeado de encinas y paisajes típicos de la dehesa extremeña. Espacios verdes y terrazas ofrecen un ambiente ideal para el descanso y la conexión con la naturaleza.

Alrededor de la laguna, verás además pastando mansamente docenas de vacas retwagyu, que son una mezcla de retinta extremeña y buey wagyu japonés y abastecen con sus delicadas carnes al asador del hotel. Algo sabe de carne Simón. En Ibiza, es el Senyor de los Entrecots, el jefe de Carnes March (carnesmarch.com), y tiene tres tiendas donde vende género de primera. 

© Andrés Campos

Las habitaciones del Hotel Cigüeña Negra combinan modernidad y confort, con un diseño elegante inspirado en la naturaleza circundante. Cada espacio ofrece vistas al paisaje extremeño, garantizando una estancia tranquila y acogedora.

De primerísima calidad es también el aceite que se elabora en la almazara ecológica de Hábitat Cigüeña Negra con las aceitunas de la variedad manzanilla cacereña que se cosechan a finales de otoño en el olivar que se extiende al norte del hotel. Al sur, lo que hay es un hermoso encinar donde ahora mismo brota por doquier la Amanita caesarea o huevo de rey, la reina indiscutible del otoño. 

© Andrés Campos

El observatorio de aves del Hotel Cigüeña Negra permite a los huéspedes disfrutar de la rica biodiversidad de la región, con vistas privilegiadas para avistar especies locales. Es un espacio perfecto para los amantes de la naturaleza y la ornitología en un entorno único.

© Andrés Campos

Para los amantes de las setas (y tengan conocimiento de micología) en esta parte de Extremadura ahora se puede disfrutar recogiéndolas. Es una experiencia ideal para conectar con la naturaleza y descubrir sabores locales en temporada.

Además de todo lo anterior, el hotel tiene un bonito hamman y un restaurante galardonado con una estrella verde Michelin. Aunque, para estrellas, las que verás en el cielo, pues hay un mirador con telescopio, cero contaminación lumínica y observaciones dirigidas por expertos.

3. FINCA LA FRONDA (ALÁJAR, HUELVA)

Uno de los enclaves con más diversidad micológica de España es la sierra de Aracena, en el norte de Huelva. Setas tan apreciadas como las que llaman tanas (Amanita cesarea) y tentullos (Boletus aereus), que en otros lugares ni las huelen, aquí se recolectan a sacos. 

© Andrés Campos

La cocina de Luismi López, chef del restaurante Arrieros, destaca por ofrecer una comida de sabores tradicionales elaborada con ingredientes frescos y de proximidad.

Para comerlas, irás al restaurante Arrieros (restaurantearrieros.es), en Linares de la Sierra. Pero si quieres buscarlas, te acercarás a la vecina Alájar y te alojarás en el hotelito rural Finca La Fronda (fincalafronda.com), porque su jardín es un bosque de alcornoques y castaños atiborrado de ellas. 

© La Fronda

Las habitaciones del Hotel La Fronda en Alájar ofrecen un refugio lleno de encanto, con decoración elegante y vistas panorámicas a la Sierra de Huelva. Cada espacio está diseñado para brindar confort y tranquilidad en medio de un entorno natural incomparable.

Este luxury bed & breakfast de la familia Wordsworth –descendientes directos del famoso poeta inglés– presume además de ser el único hotel del mundo donde el huésped se encuentra cada noche debajo de la almohada un poema distinto, no hace falta decir de qué autor. 

© Andrés Campos

Los conciertos de piano de Óscar Perversa en el Hotel La Fronda son una experiencia única, donde la música clásica se fusiona con el ambiente acogedor del hotel. Sus interpretaciones crean una atmósfera mágica, ofreciendo a los huéspedes una velada inolvidable.

Se cena bien todos los días, pero los sábados aún mejor, oyendo las melodías que toca al piano el músico Óscar Perversa, el marido de Cristina Wordsworth. Después, el silencio más absoluto y, debajo de la almohada, un papelito que reza: “Salvaje es la música de los vientos otoñales entre los bosques descoloridos”. Ya sabes lo que te espera mañana: diez hectáreas de faded woods para pasear buscando Boletus. Nunca ha sido tan romántico coger setas.  

4. CASA PALACIO REINA DE TARDAJOS (VINUESA, SORIA)

Cualquiera que busque habitualmente setas sabe que el mejor lugar de España, el más deseado, es la sierra de Urbión, donde nacen el río Duero y unos Boletus edulis de impresión. 

© Casa Palacio Reina de Tardajos

El Hotel Reina de Tardajos destaca por su arquitectura tradicional que refleja el encanto rural de la zona, con una cuidada combinación de piedra y madera.

El hotel Casa Palacio Reina de Tardajos (reinadetardajos.com), en Vinuesa, hace descuentos en temporada de setas y organiza una búsqueda del tesoro micológica, escondiendo diez premios en otros tantos Boletus edulis que hay repartidos por el bosque. La estancia te puede salir gratis. 

Otra búsqueda que puede hacerse en cualquier momento del año, sin salir del hotel, es la de la triste historia de la Reina de Tardajos. Por todas las instalaciones y zonas comunes hay distribuidos fragmentos de la misma. 

© Andrés Campos

'Boletus edulis' con premio, en un bosque cerca de la Casa Palacio Reina de Tardajos

Como si de un puzle se tratara, los huéspedes pueden embarcarse en la búsqueda de todos los versos y reconstruir la vida de Pascuala Calonge (1816-1846), a la que llamaban la Reina de Tardajos por su deslumbrante belleza: una preciosa malcasada que terminó (¡atención, spoiler!) cargándose a su marido y siendo agarrotada junto a su amante. 

© Casa Palacio Reina de Tardejos

Los interiores del Hotel Casa Palacio Reina de Tardajos en Vinuesa, Soria, ofrecen un ambiente elegante y cálido, combinando elementos rústicos con toques contemporáneos. Cada espacio está decorado con gusto, creando una atmósfera acogedora y sofisticada que invita a la relajación y el confort.

Su hija, la Reinilla, heredó esta casona palaciega de la plaza Mayor de Vinuesa, que hoy es un hotel de diez elegantes habitaciones con muebles restaurados y telas originales del siglo XIX y con vistas al pinar más grande de Europa, miembro del club de calidad Rusticae (rusticae.es). ¡Ah!, no olvides sacar el permiso para buscar setas. Más info, en vinuesa.es/micología y en la cuenta de Instagram del hotel, @reinadetardajos.

5. FINCA LOS ABETOS (CÓRDOBA)

Córdoba es una ciudad bellísima, pero en verano –en realidad, desde mayo– no hay quien pueda admirar sus patios, su Judería, su Mezquita…, como no lleve el stillsuite de Dune o la armadura contra el calor de Zelda

© Hotel Finca Los Abetos

Rodeado de exuberantes jardines y paisajes, el hotel ofrece un ambiente tranquilo ideal para escapar del bullicio urbano.

En otoño puedes disfrutar de ella a tope, a pleno sol, sin que te chisporroteen las neuronas. Para esto son perfectas las experiencias que propone Finca Los Abetos (hotelfincalosabetos.com), el único hotel campestre de la ciudad, que está al norte de la misma, justo donde se acaban las casas, en las faldas de Sierra Morena. 

© Hotel Finca Los Abetos

Los retiros de yoga del hotel proporcionan un espacio sereno y natural, perfecto para la meditación y el bienestar. Con instructores experimentados y un entorno idílico, estos retiros fomentan la conexión mente-cuerpo y la relajación profunda

Paseos en bici de montaña, retiros de yoga, escapadas de oleoturismo y culturales…, son algunas de las experiencias responsables y respetuosas con el medio ambiente que se desarrollan dentro y fuera de esta espléndida finca, que está presidida por una casa de estilo colonial del siglo XIX. 

¿Demasiada actividad? Para parar un buen rato, el restaurante del hotel, Calma (restaurantecalma.com), ofrece un menú degustación –anchoa sobre brioche con mantequilla de oveja de Fuente Obejuna, salmorejo del momento con atún rojo macerado en fino y soja, butifarra cordobesa con emulsión de alubias en salsa verde y cinco pases más–, por solo 49 euros. Más info, en rusticae.es